El Programa Nacional de Salud Escolar (PROSANE), creado por Resolución 439/2008, es una Política Integrada de cuidado para la población en edad escolar, que busca promover el acceso y el cuidado de la salud, considerando a niños y adolescentes como sujetos de derechos. El mismo se enmarca en la Ley N° 26.061 “Ley de Protección Integral de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes”.

Tiene como misión desarrollar y fortalecer políticas integradas de cuidado entre los ámbitos de Salud y Educación, ofreciendo una respuesta activa a las necesidades de atención de niños y adolescentes en edad escolar, e impulsando acciones de prevención de enfermedades y promoción de la salud.

Los destinatarios del PROSANE son los niños y adolescentes de nivel inicial, primario y secundario, tanto de escuelas públicas como privadas, en todo el territorio nacional.

Son objetivos específicos del Programa Nacional de Salud Escolar:

• Propiciar y fortalecer el cuidado de la salud de niños y adolescentes en edad escolar dentro de la estrategia de atención primaria, promoviendo la accesibilidad al sistema de salud y articulando con el segundo y tercer nivel de atención.
• Identificar el estado de salud de los niños y adolescentes de las cohortes seleccionadas mediante un Control Integral de Salud, que contemple el seguimiento y la resolución de las problemáticas detectadas.
• Impulsar y desarrollar acciones de promoción de la salud junto a la comunidad educativa, favoreciendo el aprendizaje, el desarrollo humano integral, la mejora de la calidad de vida y el bienestar colectivo.
• Promover entornos escolares saludables, constituidos como espacios físicos, emocionales y sociales que brinden oportunidades para que sus miembros vivencien y adopten comportamientos que favorezcan su bienestar.
• Generar información sanitaria oportuna para la gestión, que sirva de base para la formulación de políticas y programas.
• Fomentar la investigación científica orientada a generar evidencia sobre este grupo etario.

Implementación del PROSANE

El PROSANE se enmarca dentro de la estrategia de Atención Primaria de la Salud.

Cada jurisdicción, mediante su planificación anual, define la estrategia que garantice la mejor cobertura de la población objetivo, el desarrollo del programa y la asignación de roles y funciones de los actores involucrados.

Los equipos del primer nivel de atención realizan el Control Integral de Salud (C.I.S.) tanto en las escuelas como en los centros de salud, favoreciendo la accesibilidad de la población al sistema sanitario y generando intervenciones oportunas.

Este control incluye un examen físico completo, evaluaciones visual, auditiva, odontológica, oftalmológica y fonoaudiológica. Además, se revisa el carné de vacunación y se aplican las dosis faltantes.

La información sanitaria obtenida se registra en la Planilla de Control Integral de Salud y posteriormente se carga en el Sistema Integrado de Información Sanitaria Argentino (SISA), lo que permite su integración con otras bases de datos y facilita el análisis epidemiológico a nivel nacional. De esta manera, el PROSANE constituye una estrategia fundamental para referenciar a la población al primer, segundo o tercer nivel de atención, para el seguimiento y la resolución de las problemáticas detectadas.

El fortalecimiento del vínculo entre la escuela y el centro de salud permite identificar temáticas que requieren acciones de promoción, las cuales se desarrollan en conjunto con docentes, directivos y familias.