Esta política federal busca fortalecer las trayectorias escolares y tender puentes hacia la revinculación de las niñas, los niños, adolescentes y jóvenes con la escuela. Entiende a la experiencia de la formación musical como un aspecto esencial del aprendizaje basado en modelos de enseñanza colectiva, que posibilita y favorece la integración y la adquisición de los contenidos curriculares.
Está destinado a estudiantes de los niveles Primario y Secundario, y a quienes que por diferentes razones se hayan desvinculado total o parcialmente del sistema educativo. Se implementa en todo el país mediante convenios celebrados con las jurisdicciones provinciales y municipales, así como con universidades nacionales.