La Oficina Anticorrupción (OA), como punto focal del Estado argentino ante el MESICIC, participa activamente de este mecanismo y de las iniciativas de prevención y control de la corrupción.

Durante la Sesión Especial sobre Corrupción y Género, la directora nacional de Ética Pública de la Dirección de Planificación de Políticas de Transparencia de la OA, Natalia Torres, presentó (de forma remota) la ponencia “El camino hacia la integridad sostenible: la incorporación de la perspectiva de género en la política preventiva”.

Al comenzar su exposición, Torres explicó que “desde la OA trabajamos con una mirada que incorpora al género y a la diversidad, esto no se puede descontextualizar de los avances de la Argentina en políticas de género como por ejemplo, la sanción de la ley Nº 27.610 de Acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE)”.

En este sentido, la funcionaria mencionó las diversas políticas que desde la OA incorporan la perspectiva de derechos humanos: la Estrategia Nacional de Integridad, el Programa Federal para la Promoción de las Políticas de Integridad y Transparencia en Provincias y Municipios, la Red Federal de Estudios Multidisciplinarios sobre Integridad y Corrupción (EMIC), el Programa Nacional de Capacitaciones en Integridad y Transparencia y el Registro Nacional de Integridad y Transparencia para Empresas y Entidades (RITE).

Respecto del RITE, Torres refirió que se divide en “lo que llamamos RITE I, instancia en la que abordamos a la integridad como anticorrupción y que se encuentra abierta a la inscripción por parte de las empresas desde el primero de enero de este año. Pero nuestra idea fue avanzar hacia una segunda etapa, que denominamos RITE II que nos permite pensar en la integridad de manera ampliada incorporando la perspectiva de derechos humanos”.

Sobre el trabajo en esta línea destacó “el primer módulo que desarrollamos es el de género, que explica y orienta sobre cómo llevar adelante una política de género y diversidad en el ámbito empresarial. Este módulo fue co-construido junto a empresas, organizaciones de la sociedad civil y universidades. El proceso contó con cuatro mesas de trabajo de las que participaron 120 profesionales y en el que se recibieron 300 aportes y comentarios”.

La Sesión Especial se dividió en dos paneles, en el primero expusieron representantes de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNDOC), del Grupo de Estados contra la Corrupción del Consejo de Europa (GRECO), de la Secretaría de Cumbres de las Américas, de la Convención Interamericana de Mujeres de la OEA, de la iniciativa '"Mujer y corrupción" del Programa de Cooperación de la Unión Europea (EUROsociAL+) y de Poder Ciudadano - Capítulo argentino Transparencia Internacional. En el segundo, realizaron presentaciones voluntarias sobre la temática representantes de diversos estados miembros del MESICIC: Argentina, Chile, Colombia, Estados Unidos, México, Panamá y Perú.