Analizar sin romper con técnicas basadas en principios físicos
Los Ensayos No Destructivos permiten diagnosticar el estado de un objeto sin causarle ningún daño. Su uso aporta soluciones en campos tan diversos como la metalurgia o la conservación de bienes culturales.
Los END permiten analizar el estado o la conservación de un objeto sin causarle ningún tipo de daño. Esto es espacialmente útil en grandes instalaciones, como centrales nucleares, y también en obras de arte y patrimonio cultural. La CNEA posee un laboratorio dedicado a estos estudios que es pionero en Latinoamérica.
Existe una amplia variedad de técnicas no invasivas que permiten “ver sin romper”, por ejemplo, ultrasonido, emisión acústica, corrientes inducidas, termografía, inspección visual, líquidos penetrantes, partículas magnetizables, radiografía y gammagrafía industrial, vibraciones, extensometría, correlación de speckles, microtopografía láser, análisis de la intensidad media dispersada, relevamiento sonoro, diagnóstico de fallas, análisis de seguridad, optimización de procesos, soldaduras y técnicas especiales.
Los Ensayos No Destructivos están basados en principios físicos y de su aplicación se obtienen los resultados necesarios para establecer un diagnóstico y tomar una decisión respecto al objeto que se está inspeccionando: si está en buen estado y se puede seguir utilizando o, por el contrario, si hay que repararlo o reemplazarlo. Asimismo, pueden planificarse las tareas necesarias para el mantenimiento predictivo y preventivo de la pieza o el sistema.
La información brindada por este tipo de estudios y la capacidad de obtenerla sin modificar las propiedades de los materiales ni afectar la aptitud de servicio, contribuyen con el aseguramiento de la calidad y la confiabilidad de la operación de una instalación. También ayudan a prevenir accidentes y, por supuesto, generan un beneficio económico al “no tener que romper”.
Estos ensayos pueden aplicarse en todas las ramas de la industria y los servicios, y en cualquier etapa del ciclo de vida: ya sea durante la etapa de desarrollo o fabricación de una pieza, un sistema o un material; como luego para evaluar y controlar las eventuales fallas que pueden aparecer por diversos factores.
Desde la década del 70, el área de Ensayos No Destructivos y Estructurales (ENDE) de la CNEA realiza actividades orientadas al diagnóstico, análisis y caracterización de materiales, componentes, sistemas y estructuras de grandes instalaciones –como lo son las centrales nucleares– con el propósito de garantizar su operación segura y confiable.
Para ello, en el ENDE sus especialistas combinan tareas de investigación y desarrollo con servicios de asistencia técnica a la industria, lo que permite potenciar sus actividades y ampliar el horizonte de aplicación de las técnicas disponibles.
Piezas únicas e irremplazables
Los Ensayos No Destructivos se vuelven fundamentales en la conservación del patrimonio cultural e histórico, ya que se trata de piezas únicas e irremplazables, generalmente, elaboradas por antiguas culturas y que deben ser estudiados y preservados para las nuevas generaciones.
Por ejemplo, mediante la arqueometria se puede conocer con qué materiales fue realizada una obra de arte, un objeto arqueológico o una pintura. También cuál es su procedencia, datación y autenticidad. De esta manera, desde los laboratorios de la CNEA se contribuye con el trabajo de artistas, historiadores, restauradores y otros especialistas dedicados a conservación del patrimonio histórico y cultural.
¿Dónde estudiar?
En Argentina, el Instituto Sabato (dependiente de la CNEA y la Universidad Nacional de San Martín) brinda una especialización en Ensayos No Destructivos, que en 2016 fue acreditada con la categoría A por la Coneau. El posgrado, dictado por expertos en técnicas no destructivas, se cursa a través de clases teórico-prácticas en los laboratorios del Centro Atómico Constituyentes.
Más información: https://www.facebook.com/CNEA.Arg/videos/vl.527613250940652/2209878059075694/?type=1