La exposición excesiva al sol puede producir envejecimiento de la piel, cataratas y cáncer de piel. Por eso:
- Evitá la exposición entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, buscá preferentemente la sombra y permanecé en espacios ventilados.
- Usá protector solar con factor de 30 o más y renovalo cada 2 horas y después de salir del agua.
- Los bebés menores de 1 año no deben recibir el sol directo. Desde los 6 meses en adelante deben usar protector solar (FPS 50 o mayor), renovado cada 2 horas y al salir del agua
- Si vas a realizar actividad física, hacelo en las horas de menos calor, usá ropa holgada, liviana, de colores claros. Cubrite la cabeza con un gorro o un pañuelo. Llevá siempre una botella de agua para mantenerte hidratado. No esperes a tener sed. Tomá abundante agua antes, durante y después del ejercicio.
Hay grupos que potencialmente pueden resultar más afectados: las mujeres embarazadas; los bebés y niños pequeños; las personas mayores de 65 años; y quienes padecen enfermedades crónicas como, por ejemplo, afecciones respiratorias o cardíacas, hipertensión arterial, obesidad y/o diabetes.
Agotamiento por calor y golpe de calor en niños/as y jóvenes