La segunda cohorte del ciclo convocó a 70 mujeres, divididas en dos comisiones de trabajo, y tiene como objetivo principal fortalecer las trayectorias de formación en materia de géneros, diversidad y derechos humanos. El curso, que consta de encuentros sincrónicos semanales y utiliza la plataforma Facebook como foro de debate, tendrá una duración de 32 horas y abordará cuatro módulos: género y vejeces; violencias por motivos de género y edad; sexualidad y diversidad en las vejeces; y pedagogía feminista. Para obtener la certificación las participantes deberán acreditar su participación, entregar actividades y presentar un trabajo integrador.

A partir de esta instancia formativa buscamos entrecruzar la perspectiva de género y diversidad con la de derechos humanos de las personas mayores; desarrollar una mirada crítica respecto a las violencias por motivos de género, edad y otras intersecciones, con el fin de poder construir espacios libres de violencias y discriminación; reflexionar sobre el buen vivir, la vida activa y la autonomía colectiva; incorporar herramientas metodológicas y pedagógicas para multiplicar las instancias de formación; y conocer los marcos teóricos y normativos que dan cuenta de los derechos humanos de las personas mayores, en especial mujeres y LGBTI+, y el rol del Estado en su garantía.

Dictamos la primera cohorte del curso destinado a La Revolución de las Viejas durante mayo y junio de este año y, tanto en aquella como en esta oportunidad, los cupos se agotaron. Esto habla de la demanda de espacios de formación y debate por parte de muchas mujeres que confluyen en la construcción política comunitaria y feminista por el buen vivir y por vejeces más libres.

En la comisión del turno mañana participó Victoria Obregón, directora nacional de Formación y Capacitación en Género y Diversidad, mientras en el turno tarde lo hizo Diana Broggi, subsecretaria de Formación, Investigación y Políticas Culturales para la Igualdad. Las tutoras de los cursos forman parte del equipo técnico de la Dirección Nacional de Formación y Capacitación en Género y Diversidad.

La Revolución de las Viejas adopta el término “vieja” como parte de su identidad y trabaja para resignificarlo de manera positiva, para visibilizarse como nuevas sujetas políticas y dar cuenta de valoraciones, deseos y necesidades que contemplen a este segmento social sin la mirada negativa que la sociedad suele colocar sobre las vejeces. Sus integrantes se dividen en grupos temáticos y territoriales, a partir de allí abordan problemáticas y debates en torno a la vivienda, cuidados paliativos, sexualidad, huertas, edadismo y mujeres emprendedoras, entre otros.