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Graciela Batticuore: "Sara Gallardo fue una trabajadora de las letras con mucha conciencia del público"

La escritora, investigadora y docente argentina fue seleccionada como una de las diez finalistas del Concurso Premio de Novela "Sara Gallardo", por su libro La caracola. En esta nota, conversamos con la autora sobre su novela, la figura de Sara Gallardo y la oportunidad de participar de un concurso dedicado a las mujeres escritoras.


Graciela Batticuore es escritora, investigadora independiente del CONICET y profesora asociada de Literatura Argentina I en la Universidad de Buenos Aires. Dirige la colección Lector&s en editorial Ampersand. Publicó la novela Marea (Caterva, 2019), traducida al portugués como Amálgama (Caravana, Brasil, 2021). Por otra parte, también editó títulos de poesía: El fin de la noche (2018), La noche (2016), Sol de enero (2015), Cuaderno de espera (2014).

Batticuore también abordó el texto ensayístico. Entre ellos, se destacan Lectoras del siglo XIX. Imaginarios y prácticas en la Argentina (Ampersand, 2017); Mariquita Sánchez. Bajo el signo de la revolución (Edhasa, 2011); La mujer romántica. Lectoras, autoras y escritores en la Argentina: 1830-1870 (Edhasa, Primer Premio de Ensayo del Fondo Nacional de las Artes 2005); El taller de la escritora. Veladas Literarias de Juana Manuela Gorriti. Lima-Buenos Aires (Viterbo, 1995).

Además, coordinó el volumen Mujeres en revolución. Otros comienzos. Historia feminista de la literatura argentina, en colaboración con María Vicens. Se trata de un proyecto colectivo en seis volúmenes, actualmente en prensa (Eduvim).

La caracola es su última novela publicada y fue seleccionada como una de las diez finalistas del concurso Premio de Novela "Sara Gallardo". Al respecto, conversamos con la autora:

-¿De qué trata La caracola? ¿Por qué elegiste este texto para concursar?

-La caracola cuenta la historia de Nina, una actriz y aspirante a escritora que atraviesa una época de crisis de identidad, en la que revisa su vida a través de una memoria de infancia, un diario íntimo que habla del presente y una serie de relatos que remontan los legados de una familia inmigrante de la que proviene. Esta joven protagonista es madre de una niña e hija de una mujer analfabeta, que experimentó los estragos de la Segunda Guerra Mundial y el fascismo en un pueblo de Italia. A lo largo de la novela, la memoria de las dos mujeres se entrecruza en diversas textualidades, también se interceptan las lenguas que hablan una y otra (el español de la hija, el italiano de la madre), abriéndose una zona de reflexiones sobre el desarraigo, la condición de las mujeres y el amor. La caracola forma parte de una trilogía narrativa que se completa con Marea (publicado por Caterva, 2019) y otra novela todavía inédita, Música materna. Elegí La caracola para concursar, porque los temas que aborda sintonizan con muchas reflexiones e interrogantes actuales sobre la vida, la identidad, lo femenino, la maternidad, la inmigración, la guerra, todas temáticas que el feminismo de los últimos años volvió a poner en debate.

-¿Qué opina sobre el aporte que realiza el Ministerio de Cultura con la entrega de un premio de estas características?

-Me parece importante que el Ministerio de Cultura ayude a la difusión de obras literarias recientemente publicadas por diversos sellos editoriales, que siguen en busca de un público más amplio o de una atención mayor por parte de la crítica. Además, creo que este proceso de selección en etapas, que destaca diez obras finalistas entre un gran conjunto de postulantes, luego cinco menciones y una obra premiada, ayuda a democratizar las posibilidades del concurso y también lo hace más atractivo.

-¿Qué representa, como autora, que este premio tenga como figura tutelar a Sara Gallardo?

-Me encanta que esa figura tutelar sea la de una escritora del siglo XX cuya obra, en su temática y elaboración, mira a la tradición de escritoras argentinas que están atrás y adelante. Gallardo no solo escribió novelas sino que tuvo una activa participación en la prensa como columnista, digamos que fue una trabajadora de las letras con mucha conciencia del público, que probó registros narrativos diversos y produjo una reflexión sobre cuestiones vinculadas con el género, la identidad cultural y social, de mucha resonancia hoy en día. Se trata, además, de una escritora que sigue inspirando a novelistas, poetas y críticas contemporáneas que se reconocen en su obra.

-En este sentido, ¿cómo fue tu acercamiento a la obra de Sara Gallardo?

-Había leído hace tiempo dos novelas suyas que me impactaron: Enero, que pone en escena el abuso, la violación, las relaciones de dominación, de clase y de género, en las que se ve envuelta una muchacha de condición humilde en el campo. Y Eisejuaz, donde hay un trabajo muy original y potente con la lengua, como arraigo poético de sobrevivencia, podríamos decir. Después conocí la obra periodística de Sara Gallardo, gracias al trabajo de alguna/os especialistas que redescubrieron su obra en las últimas décadas y la pusieron nuevamente en circulación. Leopoldo Brizuela fue uno de ellos. También Lucía de Leone, que compiló y prologó un material muy valioso en dos libros magníficos: Macaneos y Los oficios, donde se pone en evidencia el engarce de Gallardo con su época, el juego que establece con el público y las condiciones de la mujer autora avanzado el siglo XX. Hay un gran trabajo de investigación detrás de esos libros y estudios críticos, que acompañan y apuntalan el valor de la obra de Sara Gallardo hoy en día.

-El concurso se lanzó en el marco del Día de la Mujer Trabajadora. ¿Cómo escritora, qué desafíos o asignaturas pendientes considerás que aún hay en cuanto a la diversidad?

-En las últimas décadas, la crítica de género y los feminismos contribuyeron enormemente a la visibilización de las mujeres autoras y las disidencias, que durante mucho tiempo habían ocupado lugares marginales o minoritarios en el canon. Creo que todo eso viene cambiando de manera interesante, pero todavía está pendiente una mirada más profunda o más consciente entre el público, del peso que tuvieron las escritoras del pasado en la conformación de una tradición literaria local. Me parece que hay que lograr que las obras de las mujeres autoras del siglo XIX y del XX forme parte de lo que leemos o tenemos a mano en la biblioteca, en las librerías, es decir que entre en el imaginario de lecturas de una manera más natural o corriente. Me gustaría que las escritoras argentinas de distintas épocas integren el panorama de los clásicos nacionales, de modo que una Juana Manuela Gorriti o una Juana Manso o Norah Lange, por mencionar algunas de las más conocidas, sean tan resonantes entre el público local como son las hermanas Brontë o George Sand o Emily Dickinson o Virginia Woolf entre el público europeo y americano también. Porque no es que no hayan existido las novelistas o las poetas en el pasado argentino sino que atravesaron épocas de olvido, segregación o ninguneo. Ese registro de escrituras y subjetividades femeninas o disidentes conviene conocerlo, porque también está en el sustrato de la literatura contemporánea.

Acerca del concurso Premio de Novela "Sara Gallardo"

La primera edición del Premio Nacional de Novela “Sara Gallardo” se realizó en 2021 y tuvo una muy buena recepción y repercusión en el ámbito cultural y literario: se recibieron más de 100 novelas sobre diferentes temáticas de escritoras de todo el país, editadas por sellos independientes y por grandes grupos editoriales. La obra que resultó galardonada con el primer premio fue la novela La sed, de la poeta, periodista y editora, Marina Yuszczuk.

Este certamen se lanzó, tanto en la actual edición como en la pasada, en el marco de la conmemoración por el “Día Internacional de la Mujer Trabajadora”, fecha que sintetiza una larga historia de luchas por la igualdad de derechos, oportunidades y participación de las mujeres e invita a reflexionar y actuar sobre las desigualdades persistentes, las asignaturas y los desafíos pendientes.

La convocatoria 2022 estuvo dirigida a autoras argentinas, -cis, lesbianas, travestis, transexuales y transgénero-, que cuenten con una novela publicada entre enero y diciembre de 2021, con circulación de manera impresa en el país.

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