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Gyula Kosice, un artista de vanguardia

Se cumplen 100 años del nacimiento del genial escultor, pintor, teórico y poeta, uno de los precursores del arte de vanguardia cinético, lumínico, e hidrocinético, y de la conjunción del arte, la ciencia y la tecnología.


“El arte es la moneda de lo absoluto. Se trata de una relación entre arte y vida, y vida y arte. Arte es creación, algo que nunca se vio, algo inédito, original, algo irrepetible. Eso que nunca se vio antes se conoce con la palabra creación”, decía en 2011 el artista de vanguardia Gyula Kosice, en una entrevista con la Secretaría de Cultura.

Kosice nació el 26 de abril de 1924 en el seno de una familia húngara, en la ciudad de Kosice, que entonces era Checoslovaquia y hoy pertenece a Eslovaquia. Llegó al país a los cuatro años de edad, en 1928, y más tarde se naturalizó como argentino. Fue escultor, pintor, teórico y poeta, y uno de los pioneros del arte cinético, lumínico e hidrocinético, como así también de la unión del arte, la ciencia y la tecnología.

El artista Gyula Kosice. Foto: Museo Kosice.
El artista Gyula Kosice. Foto: Museo Kosice.

Nació con el nombre de Ferdinand Fallik, sin embargo tomó por nombre el de su ciudad natal, Kosice, un modo de recordarla para siempre. “Kosice”, a secas, así prefería que lo llamaran. Estudió dibujo y modelado en academias de cursos libres, y asistió por un período breve de tiempo a la Escuela de Bellas Artes Manuel Belgrano.

En 1944 creó Röyi, la primera escultura articulada y móvil de Latinoamérica. Ese mismo año integra el grupo editor de la revista Arturo –que proponía un arte de pura invención, no figurativo–, en la que publicó tanto textos teóricos como poemas. En octubre de 1945 participó en una exposición en la casa del psicoanalista Enrique Pichon-Rivière y, en diciembre, en la casa de la fotógrafa Grete Stern.

Segunda exposición de Arte Concreto Invención. Casa de Grete Stern, 1945. Foto: Museo Kosice.
Segunda exposición de Arte Concreto Invención. Casa de Grete Stern, 1945. Foto: Museo Kosice.

En 1946 funda el Arte Madí, lo nombra y escribe su manifiesto. Propone la creación e invención totales, liberando al arte de todas las ataduras. Fue un gran impulsor de esa agrupación, organizó numerosas exposiciones y contribuyó a su difusión internacional. Fundó y dirigió la revista Arte Madí Universal, de la que editó ocho números. En 1948 fue invitado a exponer obras del grupo en el Salon des Réalités Nouvelles de París, lo que llevó a Madí a consagrarse a nivel internacional.

Atraído por el uso de nuevos materiales, Kosice experimentó con plexiglás, vidrio y tubos de gas de neón. Más adelante, a su interés por el movimiento, le sumó el uso del agua y empezó a hacer esculturas hidrocinéticas.

A partir de su afirmación “El hombre no ha de terminar en la tierra”, que realizó en la revista Arturo, a comienzos de los años setenta creó la Ciudad Hidroespacial, un proyecto urbanístico, artístico y poético que propone hábitats suspendidos en el aire a partir de la energía contenida en el agua. La mayor parte de esta obra se encuentra hoy en el Museum of Fine Arts of Houston.

El artista Gyula Kosice. Foto: Museo Kosice.
El artista Gyula Kosice. Foto: Museo Kosice.

“Si la obra de arte, si mi obra de arte no habla, entonces no valgo nada; la obra tiene que hablar por sí misma, a través de su presencia y su creación. Hay una predisposición a considerar el arte solamente como una superestructura, pero es más que eso. Lo peor que le puede pasar a una artista es alimentar permanentemente su ego; debe poder consolidar una cierta humildad para que ello permita alcanzar una difusión del más alto nivel, lo que significa llegar al pueblo, a los otros. Esto es una definición mía, no hay que tomarla muy al pié de la letra, pero está muy cerca de la verdad”, decía Kosice en esa misma entrevista de 2011.

Hizo cincuenta exposiciones individuales e integró más de 500 muestras colectivas. Así como también publicó 18 libros.

Sus obras figuran en museos y colecciones privadas de Argentina, de Latinoamérica, de Estados Unidos, de Europa y de Asia.

Murió el 25 de mayo de 2016, a los 92 años, en la Ciudad de Buenos Aires.

Gyula Kosice posa frente al Centro Pompidou en París. Foto: Museo Kosice.
Gyula Kosice posa frente al Centro Pompidou en París. Foto: Museo Kosice.

Reconocimientos

En 1962, ganó el Premio Di Tella en 1962 y en 1982, el Konex Platino. En 1989 fue distinguido con el grado de Caballero de las Artes y las Letras por el gobierno de Francia. En tanto que en 1994, recibió el premio a la Trayectoria en Artes Plásticas, otorgado por el Fondo Nacional de las Artes.

Fue declarado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires, en 1997, y homenajeado en el Senado de la Nación en 2006. Recibió el Premio Cultura Nación en 2007. La Secretaría de Cultura de la Nación le realizó un homenaje a los 70 años de trayectoria en 2012.

En 1991 realizó su Exposición Retrospectiva en el Museo Nacional de Bellas Artes, y en 1999 expuso en el Centro Cultural Recoleta. En 2005, participó en la exposición Big Bang, Centro Pompidou, en París. En 2013, el mismo Pompidou creó la sala Kosice y el arte concreto, con obras de los años cuarenta, que pasaron a formar parte de la colección permanente del centro de arte francés.

Fotomontaje Madí. Grete Stern y Gyula Kosice, 1946. Foto: Museo Kosice.
Fotomontaje Madí. Grete Stern y Gyula Kosice, 1946. Foto: Museo Kosice.

Cine

En 2016 se estrenó Kosice Hidroespacial, un documental sobre la vida y la obra del artista, dirigido por Gabriel Saie. Contó con el testimonio de familiares, críticos, historiadores y amigos de Kosice.

Fuentes: Secretaría de Cultura de la Nación, Museo Kosice.

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