Buenos Aires - “El criterio de equivalencia es una herramienta muy importante que permite focalizar en los objetivos independientemente de las formas en que se los logre”, señaló la presidenta del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Diana Guillén, al disertar en la “Jornada de intercambio de experiencias que promueven la convergencia regulatoria en materia de equivalencia” organizada, de manera virtual, por el Instituto Interamericano para la Cooperación con la Agricultura (IICA) y la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI).

Al hablar en el panel “Caracterización actual de los sistemas nacionales regulatorios de cara a las equivalencias”, Guillén consideró: “las normas no son el objetivo sino lograr las partidas libes de plagas en el caso de sanidad vegetal y ese fin se puede lograr a través de distintas opciones como técnicas o de vigilancia o de certificación”.

“El objetivo no es negociable, las alternativas si y no se debe dejar de lado que cualquier alternativa debe brindar el nivel de seguridad equivalente entre sí”, añadió y calificó de “claro” el criterio de equivalencia en el ámbito de la sanidad vegetal fijado por las normas internacionales.

“Tenemos un montón de herramientas: país libre, área libre, área de baja prevalencia, aplicación de medidas integradas o sistema de mitigación de riesgo, establecimiento de lugares y sitios de producción libres y partida libre. Cualquiera de estas opciones es para llegar a la partida libre”, afirmó la presidenta del Senasa, que estuvo acompañada por el director regional de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), Luis Barcos.

En este marco, Guillén también evaluó como positivo el planteo de la ALADI para incorporar la producción de la agricultura familiar al comercio internacional y señaló: “Es innegociable que los alimentos deben ser sanos e inocuos, pero se pueden plantear las formas de producción”.

En tal sentido destacó que el Senasa ha presentado a la Comisión Nacional de Alimentos (CONAL) “un proyecto de equivalencia sobre producción y comercialización de los alimentos de la agricultura familiar que reglamenta cuestiones de inocuidad y calidad con el fin de que cumplan con determinados estándares en relación a la higiene teniendo en cuenta las formas productivas del sector”.