Lo primero que hace un usuario es un escaneo de la información, comenzando con la parte superior izquierda del contenido, haciendo un barrido en forma de F, L invertida o E.

Por eso es fundamental captar la atención con títulos dominantes y con información relevante en el primer párrafo.

Los usuarios buscan palabras claves dentro del texto, los recursos para destacar información son:

• negritas,
• citas,
• viñetas,
• subtítulos.

Expertos en usabilidad afirman que los usuarios leerán un contenido web si este cumple con una serie de principios. Dos de ellos refieren específicamente a la claridad del texto:

Legibilidad:

• Palabras sencillas y breves.
• Oraciones simples (estructura sujeto + verbo + complemento) y cortas.
• Párrafos con pocas oraciones y extensión.
• Anclas visuales como negritas, listas o párrafos destacados.

Comprensión

• El encabezado — título y primer párrafo del contenido— resume la información clave que le permite al lector saber que llegó a la página que necesita y que el resto del contenido le es interesante y útil.
• Cada párrafo presenta una sola idea.
• El lector no tiene que recordar lo que leyó en un párrafo anterior para comprender párrafos posteriores.
• A veces las imágenes y las infografías pueden explicar una idea compleja mejor que un texto.

Los expertos observan que los usuarios leen poco más del 20% del texto de una página web. Esto nos obliga a ser breves y concisos cuando publicamos información y a redactar textos atractivos.

Por otro lado, tengamos presente que los dispositivos móviles se utilizan cada vez más para leer información en la web. La compañía Google publicó los siguientes datos sobre la Argentina, correspondientes a 2017:

• 78% de la población estaba conectada a la Red
• 69% usa celulares inteligentes para interactuar con Internet

En síntesis: los documentos del Estado no pueden ser enciclopedias ya que los usuarios quieren hacer algo con la información (no solo leer) y, cada vez más, leen la información en pantallas de celulares.