Presidencia de la Nación

Bicentenario de la Batalla de Maipú



La Batalla de Maipú fue un enfrentamiento armado decisivo dentro del contexto de la campaña libertadora y tuvo lugar el 5 de abril de 1818, en el sector conocido como los Cerrillos del Maipo, Chile.



Reseña histórica

Antecedentes

Tras la derrota en Cancha Rayada, San Martín tuvo un arduo trabajo para reorganizar el Ejército Unido. Como primera medida, viajó a Santiago de Chile para acallar los rumores de su muerte, restablecer la confianza pública y subir la moral de sus hombres. Además, debió rearmarse: conseguir municiones y artillería, luego de que se perdiera la que tenían en manos del enemigo.
Cuando los realistas se enteraron de la reconformación de las fuerzas patriotas, partieron desde Talca rumbo a Santiago; San Martín se mantenía al corriente de sus movimientos a través de sus tropas de exploración.
Ya a principios de abril, el Ejército Unido era nuevamente una fuerza sólida que contaba con 5400 hombres y 21 piezas de artillería.

La batalla

San Martín y sus tropas se situaron al sur de Santiago de Chile, en la parte oriental de Loma Blanca, con el objetivo de cortar el avance de Osorio y su ejército. El enemigo terminó acampando en las cercanías de la Hacienda “Lo Espejo”.
En la mañana del 5 de abril, ambas fuerzas se desplazaron para colocarse frente a frente.
San Martín mantuvo sus batallones de Infantería en el centro de la formación flanqueados por la caballería a ambos lados. En el extremo noroeste, se encontraba la 1ra División al mando del coronel Gregorio de Las Heras, mientras que, en el sureste, se hallaba la 2da División, a cargo del coronel Rudecindo Alvarado. La 3ra División constituía la reserva y se situaba atrás de la formación, al mando del coronel Hilarión de la Quintana.
La artillería patriota fue la primera en abrir fuego; los realistas contestan con fuego corto delatando su posición, por lo que San Martín ordena el avance de sus flancos. Las Heras tiene éxito y alcanza una posición favorable para continuar presionando al enemigo.

Por otro lado, la división de Alvarado sufre un revés y se ve obligada a retroceder ante el avance realista. Al observar esta situación, San Martín ordena a sus tropas de reserva que ejecuten un movimiento oblicuo en apoyo a las tropas de Alvarado. Esta maniobra logra igualar la situación mientras que la presión desde el otro flanco continuaba arremetiendo contra los realistas.
Inclinando la balanza a su favor, todas las fuerzas del Ejército Unido atacan a la vez.
Osorio ordena la retirada hacia la hacienda Lo Espejo, en donde al mando de Ordóñez las fuerzas realistas presentan la última resistencia. Antes del desenlace final, arriba al campo de batalla el general O’Higgins (convaleciente por una herida en el codo) al mando de unos 1000 hombres más, quienes se suman a la persecución del enemigo en retirada.
Al encontrarse con San Martín, ambos generales se abrazan y exclaman:

"¡Gloria al salvador de Chile!"

Bernardo O’Higgins

"Chile no olvidará jamás el nombre del ilustre inválido que el día de hoy se presentó al campo de batalla en ese estado."

José de San Martín

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Consecuencias

  • Aseguró la independencia de Chile
  • En relación a la Campaña Libertadora y el plan continental, desencadenó una serie de ventajas que incluyeron un gran impulso anímico a las tropas, otras victorias, la Independencia de Perú, entre otras.
  • Será utilizada como ejemplo de táctica aplicada en el terreno al emplear en oportunidad la reserva.

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Bicentenario de la batalla de Maipú

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Libros

Maipú, un abrazo para la historia

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En el bicentenario de la victoria de Maipú, los ejércitos de la Argentina y de Chile que son la expresión militar de nuestras naciones han querido ofrecer a sus actuales generaciones este libro conmemorativo de la hazaña libertadora que protagonizaron sus ancestros. Por doscientos años nuestras repúblicas han vivido en el goce de aquella libertad que se reafirmó en los llanos de Maipo, al amparo de la Santísima Virgen del Carmen, la patrona bajo cuya protección se batieron las armas patriotas. Hemos compartido fraternalmente dos siglos de paz y de amistad. Y cuando han surgido querellas entre nuestros Estados cuya frontera es una de las más extensas del mundo han sido los ciudadanos y sus mandatarios los que, inspirados en los laureles que juntos cosechamos, han encontrado siempre la fórmula para hacer perdurar la paz, la más noble herencia que podemos legar a los chilenos y a los argentinos. Cuando el desenlace de la batalla estaba ya próximo, sin siquiera desmontar, los generales San Martín y O’Higgins se entrecruzaron en un abrazo emocionado. Habían sido cuatro años de una extraordinaria mancomunión de voluntades. ¡Que siga siendo ese abrazo de Maipú, como hasta hoy ha sido, el gesto que ilumine por siempre la hermandad de nuestras patrias!


El cruce por la libertad

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Hace doscientos años, el Ejército Argentino daba inicio a una de las hazañas más importantes de la historia americana: se ponía en marcha el plan continental de José de San Martín, que abriría el camino a la emancipación de Chile y del Perú.

Parecía una empresa de cumplimiento imposible para unas provincias en un evidente estado de atraso, de pobreza y de desunión. Pero a pesar de todo, se logró vertebrar una formidable máquina de guerra: el Ejército de los Andes.

A dos siglos de aquella proeza, en la que todo un pueblo en armas se supo unir para asegurarse la emancipación, el Ejército rinde homenaje, con esta publicación, a aquellos que se ganaron el título de “Vencedores de los Andes y Libertadores de medio continente”.

Aquí, el intercambio epistolar del padre de la patria permite ver al soldado de carne y hueso preparando la batalla, al hombre con pasiones y desvelos por la causa de la independencia. Sin dudas, la lectura de este libro aportará a las nuevas generaciones de argentinos un modelo ejemplar de amor a la patria y pasión por la libertad.

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Video

Epopeya, mas allá de la gloria

Es 1817 y el general San Martín, de forma introspectiva, narra la gesta que habría de convertirse en uno de los grandes hitos militares de la región y del mundo. Sus pensamientos revelan su altruismo desapegado del poder y su visión de estadista. El relato en primera persona tiene como fuentes las cartas escritas por él a Pueyrredón, su arenga a las tropas en el Plumerillo (Mendoza) y el parte de guerra de la batalla de Chacabuco. En la película se mezcla la gesta sanmartiniana con imágenes de la campaña binacional “Cruce de los Andes – 200 Años”, operación militar que organizaron los ejércitos Argentino y Chileno para conmemorar “la mayor epopeya en suelo americano”.

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