Buenos Aires - Con el objetivo de fortalecer las respuestas ante emergencias por langostas, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), con el apoyo del Ministerio de Agricultura y Ganadería de Córdoba y el sector privado, dictó un curso que abordó aspectos teóricos y prácticos orientados al seguimiento y control de mangas de la plaga.

En esta segunda edición de la capacitación, realizada en Cañada de Luque, Córdoba, participaron actores públicos y privados del ámbito nacional y provincial. Durante su desarrollo se dictaron contenidos relacionados a aspectos básicos como biología, dinámica de langostas y acciones de vigilancia. El curso contó con el acompañamiento del Grupo APC, la Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes (CASAFE) y la Federación Argentina de Cámaras Agroaéreas (FeArCA), con los cuales se trabajó sobre la calibración y evaluación de la calidad de aplicaciones terrestres y aéreas.

Asimismo, el Senasa, junto con el Ministerio de Agricultura de Córdoba, abordó la importancia de respetar los protocolos vigentes, el uso responsable de fitosanitarios y los alcances de la Ley 9.164 de Agroquímicos de la provincia. Además, se realizaron dinámicas de vuelo en las instalaciones de la empresa Biondi Agroservicioes Aéreos y con la colaboración de la Empresa NFM Agrosoluciones, se llevaron a cabo por primera vez pruebas con drones aplicadores y se dialogó sobre el uso de esta tecnología para el control de la plaga.

La actividad presencial contó con la participación del secretario de Agricultura de Córdoba, Marcos Blanda; del director de Fiscalización y Control del Ministerio de Agricultura y Ganadería de la provincia, Gustavo Balbi, y del director del Centro Regional Córdoba del Senasa, Gustavo Zabaleta quien sostuvo: "Estos ejercicios de simulación son clave para una mejor preparación de los equipos técnicos y permitirá que todos los sectores involucrados puedan actuar de forma rápida y articulada".

Por su parte, el coordinador general de Emergencias de la Dirección de Sanidad Vegetal del Senasa, Héctor Medina afirmó que “la capacitación y preparación en tiempos de calma, es decir, cuando la plaga no está presente es un esfuerzo muy valorable de todos los actores involucrados y nos permite estar entrenados para dar respuesta a futuras emergencias.”

La langosta es un insecto polífago, que se alimenta de casi todo material vegetal, incluidos los cultivos, pastizales y flora nativa. Tiene la habilidad de cambiar su comportamiento y fisiología (color, tamaño y forma) en respuesta a cambios en la densidad poblacional, pasando de un estado solitario a gregario y viceversa. Estas transformaciones, su capacidad de dispersión (hasta 150 km/día), y su voracidad, determinan una gran amenaza para toda la actividad agropecuaria del país. Es una plaga con un gran poder migratorio y no reconoce fronteras.

El Senasa cuenta con una herramienta para dar avisos ante la sospecha de presencia de la plaga a través de su Whatsapp al 11 5700 5704 (opción 2) y para que a través de un bot los interesados pueden obtener información sobre la plaga.