Paraná, (Entre Ríos) - El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) inspeccionó y monitoreó establecimientos dedicados a la elaboración y/o distribución de alimentos balanceados de la provincia de Entre Ríos, que se encuentran registrados ante el Organismo.

En esta oportunidad, del 10 al 12 de abril y en el marco del Programa de la Coordinación de Fiscalización de Establecimientos de Alimentos para Animales (COFIAL), se realizó la inspección de cuatro plantas elaboradoras y distribuidoras de alimentos balanceados y premix ubicados en las localidades de Concepción del Uruguay(rehabilitación), Larroque (rehabilitación), y Urdinarrain, ambos del departamento Gualeguaychú, en la provincia de Entre Ríos.

Los premix, son mezclas complejas de vitaminas, minerales, oligoelementos y otros aditivos nutricionales que se incorporan a los alimentos balanceados. La COFIAL asegura los procesos que garantizan la aptitud de los alimentos para animales destinados a consumo humano y la protección de los mercados, incluidos el de alimentos para mascotas.

Las tareas de auditoría fueron encabezadas por Néstor Micheloud, coordinador de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria del Centro Regional Entre Ríos del Senasa. En tanto que las acciones de fiscalización estuvieron a cargo de profesionales de la Supervisión de Higiene e Inocuidad de Productos de Origen Vegetal y Piensos del Centro Regional, Patricia Sian y Carolina Kaul, acompañadas Florencia Ledri, inspectora a cargo de los establecimientos, en el marco del Programa de Fiscalización y Control a plantas elaboradoras de alimentos balanceados destinados a consumo animal.

En este caso se realizó el monitoreo en el marco del cumplimiento de la Resolución Senasa Nº 594/2015 destinada a asegurar la salud de los animales y la inocuidad de los alimentos obtenidos a partir de ellos, afianzando su tarea en el cuidado de la salud pública.

Es importante recordar que para habilitar un establecimiento, el Senasa evalúa sus planos e infraestructura; el análisis de los diagramas operativos y de líneas de producción; la constatación de registros municipales e impositivos y la validación de un responsable técnico matriculado.

De esta manera, se diferencia a los establecimientos como distribuidores o elaboradores, por las materias primas que utilizan y si los productos que elaboran son destinados como alimento para animales de compañía o para animales de consumo humano.

En el caso de los establecimientos distribuidores, el Senasa supervisa la continuidad anual de la actividad comercial, en tanto que para las plantas elaboradoras planifica regularmente muestreos especiales, en los cuales se busca detectar la utilización de proteínas animales prohibidas, además de controlar las condiciones sanitarias.

Cabe recordar que cuando se elabora un alimento balanceado se tiene que asegurar que cumpla con todas las condiciones de calidad e inocuidad, las buenas prácticas de manufactura, que engloban aspectos como la higiene, la trazabilidad, el mantenimiento y el control adecuado del proceso de elaboración.

El Senasa realiza estos operativos de fiscalización a los actores de la cadena alimenticia con el fin de velar por el cumplimiento de las normativas vigentes en lo que respecta a la producción, traslado, elaboración y comercialización de agroalimentos y asegurar el consumo de alimentos seguros.