Curso teórico-práctico para el diagnóstico de triquinosis en la provincia de Formosa
El Senasa disertó sobre normativa sanitaria en una jornada organizada por el CIT, que contó con la participación de 24 profesionales.
Formosa- El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) disertó en Formosa sobre normativa sanitaria referida a triquinosis en el marco del "Curso teórico y práctico para el diagnóstico de Trichinellosis desde Una Salud", organizado por el Centro de Investigaciones y Transferencias de Formosa.
El curso se llevó a cabo el 16 de diciembre en las instalaciones del CIT y convocó a 24 profesionales, entre ellos, médicos veterinarios, bioquímicos, licenciados en tecnología de los alimentos, técnicos de laboratorio y técnicos y licenciados en bromatología del Ministerio de Producción y Ambiente, del Senasa, de la Municipalidad de Formosa, del Hospital Central de Formosa, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), de la Universidad Nacional de Formosa (UNAF), del Centro de Validación de Tecnologías Agropecuarias (Cedeva) y de la Dirección de Bromatología, Saneamiento y Zoonosis.
Durante la capacitación se realizó una actualización en la biología, epidemiología, diagnóstico y control de la trichinellosis en animales domésticos y silvestres. Asimismo, tuvo un abordaje en humanos en la línea de "Una Salud". La parte práctica permitió a los técnicos adquirir nociones sobre la metodología y el equipamiento necesarios para el diagnóstico en el laboratorio mediante la técnica de digestión artificial.
En la apertura la directora del CIT Formosa, Laura Lozina dio la bienvenida a los presentes y destacó la importancia de este tipo de capacitaciones para poder realizar el diagnóstico temprano de la triquinosis, considerada una enfermedad transmitida por los alimentos (ETA).
Seguidamente, José Álvarez profesor titular de enfermedades Parasitarias de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UNNE disertó sobre actualización en biología, epidemiología, diagnóstico y control de la trichinellosis en animales domésticos y silvestres. Luego, el jefe de laboratorio Resistencia del Senasa, Sergio Buca, explicó la Resolución 555/2006, referente a esta enfermedad.
Mientras que Gustavo Fernández, profesor adjunto de Parasitología humana e investigador del Instituto de Medicina Regional de la UNNE, expuso sobre actualización en biología, epidemiología, diagnóstico y control de la triquinellosis en humanos abordada desde una salud. Finalmente, se realizó una demostración y prácticas de diagnóstico en laboratorio.
El cierre estuvo a cargo del director del Centro Regional Chaco Formosa del Senasa, Facundo Galvani quien explicó que esta jornada se enmarca en la estrategia de la gestión regional del Senasa para fortalecer la salud pública y en el plan de acción de la Mesa Porcina, integrada por diferentes instituciones, entre ellas, el INTA y el Senasa.
Lozina recordó que el CIT se encuentra realizando diagnósticos gratuitos de triquinosis para el sector familiar con equipamiento de la Secretaría de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena, que el Senasa determinó entregar al CIT. De igual modo, ofreció capacitar a personal de otras entidades de la provincia que quieran realizar el diagnóstico.
"Este curso fue diseñado desde el concepto de una salud, o sea, no solo es importante diagnosticar la enfermedad en animales, sino también concientizar en la importancia del diagnóstico, por los riesgos que implica en humanos consumir cerdo con este parásito pudiendo provocar la enfermedad con un cuadro clínico, muy variable".
Los principales síntomas de la triquinosis son: fiebre, diarrea, vómitos, hinchazón de párpados, fotofobia o decaimiento similar al de la gripe y dolores musculares.
La triquinosis es una zoonosis producida por un parásito del genero Trichinella spp. Las personas se enferman al consumir carne insuficientemente cocida o productos elaborados con carne de cerdo o de animales silvestres, (principalmente jabalíes y pumas), que contienen en sus músculos larvas de Trichinella.
La faena doméstica y la carneada de cerdos en el campo –hábitos difundidos en la población rural y periurbana– promueven la distribución y comercialización de productos porcinos elaborados de forma casera o artesanal.
Como en este proceso se utilizan carnes sin cocción, los chacinados, embutidos y salazones resultantes pueden contener larvas de los parásitos que producen la enfermedad. Una vez que ingresan al organismo de las personas, las larvas de trichinella spp pasan por el sistema digestivo y viajan por la sangre hasta llegar a los músculos, donde se alojan.
Quienes produzcan y elaboren estos chacinados deben verificar que la carne sea apta para consumo humano. Para ello, deben remitir una muestra de carne (entraña) de cada animal para que sea analizada en un laboratorio de la zona mediante la prueba de digestión artificial.