Cuencas hídricas
Una cuenca hídrica es un área de terreno donde el agua drena en un punto común —un arroyo, un río o un lago cercano—. Es importante desde el punto de vista ecológico porque permite mantener la biodiversidad y la integridad de los suelos. Constituye, además, la principal fuente de agua dulce de la mayoría de las ciudades del mundo. Además, es un tipo de cuenca utilizada como unidad de gestión ambiental ya que permite organizar la gestión del agua con un enfoque territorial integral.
Está delimitada por la línea de las cumbres o elevaciones del terreno también llamada ‘divisoria de aguas’.

Clasificación
Desde el punto de vista hidrológico, según el comportamiento del escurrimiento superficial y el lugar hacia el cual convergen las aguas, las cuencas se clasifican en:
-
Cuencas exorreicas: son aquellas cuyas aguas llegan al mar o al océano.
-
Cuencas endorreicas: son aquellas cuyas aguas no llegan al mar porque los ríos desembocan en lagunas interiores o porque se agotan por evaporación, infiltración o consumo.
-
Cuencas arreicas: son aquellas zonas donde no se definen cursos fluviales debido a la falta de agua en suelos muy permeables.
Actividades antrópicas
Los principales problemas que enfrentan las cuencas hídricas están asociados al cambio del uso del suelo, a las alteraciones de los regímenes de drenaje generados por los seres humanos, a la contaminación por efluentes sin tratamiento adecuado y al mal uso de productos agroquímicos, entre otros.