Un grupo de funcionarios de la Secretaría de Deportes de la Nación, del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad, y del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos capacitaron al personal de educación del Complejo Penitenciario Federal IV de Ezeiza en políticas de género y diversidad.

Esta formación, que se extendió a lo largo de ocho jornadas, finalizó el viernes 3 de diciembre con la entrega de certificados para los agentes que participaron y con el desarrollo de un partido de fútbol entre las personas privadas de la libertad y el equipo de futsal femenino de la Asociación Personal Legislativo.

Guillermina Gordoa, Directora Nacional de Políticas de Género de la Secretaría de Deportes, destacó que este proyecto, que en un primer momento se inició en el CPF 4 con la población trans y luego se hizo extensivo al resto de las internas, “es fundamental para acercar y fomentar el ejercicio y la recreación para la transformación de la vida todos los seres humanos, y más aún bajo una mirada abarcativa e inclusiva”.

Junto a ella, Marcos Arienti, integrante de ese organismo y principal responsable del Programa Boxeo sin cadenas, que se desarrolla en el ámbito intramuros, resaltó que la meta para 2022 es trasladar esta tarea al resto de las provincias en las que se encuentra presente el Servicio Penitenciario Federal. Y agregó: “el deporte, en cualquiera de sus versiones, tiene que ver con unir a la gente a través de la conformación de un grupo que persiga un mismo objetivo. El trabajo en equipo dentro de los pabellones quizás no es tan normal, pero el deporte lo logra automatizar naturalmente”.

Por su parte, en representación de la Subsecretaría de Asuntos Penitenciarios, Eva Asprella hizo especial énfasis en el reconocimiento de la labor de los profesores de educación física de la institución “quienes hicieron un esfuerzo muy meritorio durante la pandemia y merecen que hoy estemos brindándoles todo nuestro apoyo”.

En este sentido, la Subsecretaría de Deportes de Nación, en pos de ratificar el compromiso respecto con este tipo de iniciativas, no sólo donó los materiales necesarios para la práctica recreativa de fútbol, vóley, básquet y boxeo para las mujeres alojadas en esa unidad penal, sino que también hizo lo propio con materiales deportivos para el gimnasio de los agentes penitenciarios, entendiendo los beneficios que esto conlleva a la salud física y mental de todos los actores intervinientes.