El Ministerio de Obras Públicas, a través de la Dirección Nacional de Transparencia, presentó un relevamiento realizado a partir de las experiencias de las distintas áreas y organismos como DIGEPPSE, AySA, ENOHSA, ACUMAR, Corredores Viales y la Dirección Nacional de Vialidad, con el fin de crear un banco de datos que permita sistematizar las experiencias y ponerlas en conocimiento de la comunidad.

La iniciativa, en la que el Observatorio de la Obra Pública ha tenido un rol central en el impulso del proyecto, incorporando aportes y recomendaciones para su mejora, tiene como propósito diseñar políticas de participación y control ciudadano para todo el ministerio, sus organismos descentralizados y empresas, para facilitar el acceso a la información, promover la participación ciudadana y brindar mayores herramientas que permitan darle transparencia a la inversión en obra pública.

En este sentido, la investigadora y docente Adriana Clemente, quien forma parte del proyecto como especialista, destacó: “No es habitual este nivel de interés por la participación ciudadana desde el Estado. Hay ciertas especificidades que hacen más complejo el desafío, entre ellas la temporalidad, porque el ciclo de una obra puede durar tres o cuatro años.

Y agregó: “Un concepto clave es el de la obra como puente. Puente hacia más o mejores derechos, como puente hacia el empleo”.

El estudio se desarrolló a partir de fuentes primarias, como el testimonio de técnicas y técnicos, profesionales y contrapartes que interactúan con el ministerio; y fuentes secundarias o suplementarias.

Como resultado general se observó una marcada preocupación por el tema y su institucionalización, aunque el establecimiento de un método estandarizado y consensuado continúa siendo una cuenta pendiente.

Entre los atributos positivos más visibles y valorados se destaca la heterogeneidad, ya que la participación ciudadana adopta distintas formas, como talleres o reuniones comunitarias, audiencias públicas, relevamientos, mesas de trabajo, consultas sectoriales, bocas de consulta y puerta a puerta.

Además, se resalta la importancia del gobierno local como un actor central en implementación de estos procesos y la participación como garantía del resultado final o la valoración de la obra.

Al respecto, el secretario de Gestión Administrativa, Guillermo Sauro, señaló: “Para los que pasaron por un gobierno local, la rendición de cuentas, el trabajo en equipo y la vocación política no son una formalidad sino una perspectiva de lo público”.

Por su parte, la directora nacional de Transparencia, Roxana Mazzola, explicó: “la participación ciudadana es una de las principales dimensiones que hace al concepto amplio de transparencia, tal como lo asumimos nosotros en este nuevo paradigma, en este enfoque de derechos”.

Durante el encuentro, las autoridades de las empresas y organismos también analizaron los pasos a seguir para establecer los procedimientos necesarios que permitan ampliar la participación y el control ciudadano.