"Gregorio, el zanahoria” es una interpretación alocada y entretenida de “La metamorfosis”, el clásico universal de Franz Kafka. Se trata de una obra diferente, escrita por Ludmila Bauk y Agustín Alzari en octosílabos rimados, con canto, coreografías y música ejecutada en vivo con sintetizadores y samplers.

Este espectáculo es una coproducción entre el Teatro Nacional Cervantes y el Teatro Municipal La Comedia, de Rosario.

Además de ser la coautora, Ludmila Bauk es la directora de la obra. Nacida y criada en Rosario, es técnica en actuación recibida en la Escuela Provincial de Teatro y Títeres y licenciada y profesora universitaria en Comunicación Social en la Universidad Nacional de Rosario. A continuación, Bauk comparte detalles sobre la obra.

-¿Para qué edad está pensada la obra?
-Está pensada para un público de entre 8 y 13 años.

-¿Cómo dialoga la obra con La Metamorfosis de Kafka y las infancias?
-No hay momento en la vida que tengamos más sensibilidad que en la niñez. Y el pasaje de la niñez a la adolescencia es un momento de mucha angustia, de descubrimiento, donde los velos se caen. Es una etapa de aprendizaje, de descubrimiento, de transformación del cuerpo, de la subjetividad y de la sensibilidad.

Creo que nadie puede entender mejor la historia de Gregorio Samsa que un niño, una niña o un niñe.

No hay que tenerle miedo a las grandes historias para las infancias. De hecho las películas más taquilleras, clásicos de la industria del cine como Kung Fu Panda, Buscando a Nemo, o Coco, tienen una base dramática trágica que envuelve el destino de sus protagonistas. Chicos y chicas comprenden y disfrutan de esas historias, y asimilan de una manera natural las tragedias.

La Metamorfosis es un clásico, y como todo clásico cada generación ve en él algo que resuena con su época. Aborda un tema clave: qué pasa con el mandato familiar, qué pasa con el distinto, qué pasa cuando cambiamos y los demás, nuestros seres queridos, ya no nos reconocen ni nos entienden.

-El final de La metamorfosis es diferente al de Gregorio...
-Creo que hoy, a 107 años de su escritura, podemos pensar en otros destinos para su protagonista, para Gregorio. Quizás en su momento, por la oscuridad que envolvía al mundo en 1915 y por cómo se pensaba al diferente, el final era sombrío.

-¿Cómo nació la idea de la obra?
-En el 2019, mi hijo tenía cuatro años y estaba fanatizado con el capítulo de Zamba con Martín Fierro. Una y otra vez sonaba en nuestro comedor:
“Aquí me pongo a cantar
Al compás de la vigüela
Que al hombre que lo desvela
Una pena extraordinaria,
Como la ave solitaria
Con el cantar se consuela”.

Agustín Alzari, mi marido, estaba corrigiendo una traducción de La Metamorfosis de Kafka para una edición que iba a circular entre las escuelas de Santa Fe, le parecía vieja y la estaba aggiornando.

Justo nos regalaron un libro precioso de Max Cachimba, “Versos selectos”, que en su tapa tenía una zanahoria re contenta de la vida y adentro unos poemas ilustrados.

Una noche sucedió la magia: ¿Qué pasaría si Gregorio se despierta convertido en zanahoria y sus familiares son patos y todos hablan en octosílabos rimados como en el Martin Fierro?

Pasaron los años, y en 2021 mi trabajo estaba en la cuerda floja. Mi jefe me avisó que podía quedarme en la calle, que había una gran posibilidad de que no pudiera seguir pagándome el sueldo. Entonces apareció la convocatoria del Cervantes y pensé que tenía que apostar a dedicarme a lo que amo: hacer teatro, y que sí, que había llegado el momento de escribir “Gregorio, el zanahoria”.

-¿Cómo llega “Gregorio, el zanahoria” al Teatro Nacional Cervantes y al Teatro La Comedia, de Rosario?
-En 2021 el Teatro Nacional Cervantes (TNC) lanzó la convocatoria Cervantes Produce en el País y junto con Agustín Alzari y Aimé Fehleisen presentamos el proyecto de “Gregorio, el zanahoria”. Pasamos a la instancia de preselección y finalmente en noviembre nos comunicaron que habíamos quedado seleccionados entre casi 200 proyectos de todo el país.

Creo que la mayor ventaja que conlleva es la posibilidad de disponer de tiempo y recursos para crear. Poder contar con un equipo de personas que cuenta con un salario, independientemente de si es alto o bajo, hace que sea posible tener tiempo para trabajar, para poder dedicarse de lleno a armar una obra artística.

Por otro lado, a mí me parecía que La Comedia era un excelente teatro para la obra, entonces el TNC le ofreció formar una coproducción y ellos aceptaron. Así que “Gregorio, el zanahoria” va a presentarse esta temporada en uno de los teatros más hermosos y míticos de nuestra ciudad.

Ludmila Bauk trabajó en teatro, cine, radio y proyectos multimedia. En 2019 recibió, junto a Agustín Alzari, la beca de creación del Fondo Nacional de las Artes para su proyecto de teatro para las infancias “La Rosa y el Pacú”. Y un año más tarde fue seleccionada por el Instituto Nacional de Teatro en el Concurso Nacional de Actividades Performáticas en Entornos Virtuales. En 2020, Le Gutí la invitó a cantar en su EP Pasitos de la Selva y en su primer single “Party Virtual”. Y en el 2021 lanzó “Bye Campeón”, disponible también en todas las plataformas de Streaming.

-¿Cómo se armó el elenco de “Gregorio, el zanahoria”?
-El elenco lo seleccionamos a través de un casting abierto en el que se presentaron 250 actores y actrices de la ciudad de Rosario. Fueron cuatro días de casting para mi muy emocionantes. Vi participar a mis maestros, a mis ídolos de la infancia, a mis colegas y también a artistas que desconocía.

Algunas de las actrices y los actores seleccionados tienen una importante trayectoria en el teatro para las infancias, junto a un recorrido muy interesante en el teatro independiente y en el oficial. Son actores y actrices con un enorme talento, ganas y dedicación.

El equipo también está compuesto por Celeste Bardach como asistente de dirección; Ramiro Sorrequieta en vestuario; Pali Díaz en escenografía y objetos; Diego Quilici en iluminación; Diego Longinotti en sonido, Agus Black en coreografía.

“Gregorio, el zanahoria” se presenta hasta el 28 de agosto, los sábados y domingos a las 16 h en el Teatro Municipal La Comedia (Mitre 958) Rosario, Santa Fe. Y durante las vacaciones de invierno las funciones serán de miércoles a domingo en el mismo horario.