En el Salón Sur de la Casa de Gobierno, Luciana Tito, Titular de la Unidad de Gabinete de Asesores de Jefatura de Gabinete de Ministros, dio apertura al encuentro, que también se realizó de manera virtual. Es el tercero, luego del Foro inaugural de diciembre de 2020 que sentó las bases para el trabajo articulado de funcionarias nacionales que advirtieron sobre el factor de desigualdad que implica la menstruación y plantearon iniciativas para revertir la situación que afecta no sólo la economía sino la salud, la educación y el trabajo de las mujeres y personas menstruantes.

Participaron Mercedes D’Alessandro, directora de Economía, Igualdad y Género; Cecilia “Checha” Merchán, secretaria de Políticas de Igualdad y Diversidad; Cecilia Gómez Mirada, subsecretaria de Asuntos Parlamentarios de la Jefatura de Gabinete.

Las presentes remarcaron que la gestión menstrual debe ingresar en la agenda pública, y diseñar políticas públicas, planes, proyectos, estrategias de territorialización para cerrar brechas de desigualdad de género. Asimismo, que ponerla en agenda, implica derribar tabúes y estigmatizaciones que las reproducen. A su vez se materializó el compromiso en identificar iniciativas y acciones de cada organismo que apunten hacia el acceso igualitario a la gestión menstrual al que se le pueda dar seguimiento.

D’Alessandro relató que “las mujeres en el territorio día a día me convencen más de la desigualdad que sufren y que necesitan un Estado presente”, y resaltó la construcción en ese sentido. A su turno, Gómez Mirada resaltó el rol y potencialidad de la Red Federal de Concejalas. En sintonía, Merchán del Ministerio de Mujeres, género y diversidad, repasó la factibilidad de articulación a nivel federal que brinda el recientemente presentado Plan Nacional de Igualdad en la Diversidad, que se propone romper la desigualdad por motivos de género.

Dentro las definiciones que se presentaron se sostiene que “la menstruación y el costo que implica menstruar generan otra forma de desigualdad que se enmarca dentro de un conjunto mayor de brechas de género”.

Y en el contexto actual de la Pandemia existe un impacto asimétrico sobre las mujeres y jóvenes. “Se ha experimentado un retroceso en su participación en el mercado laboral, así como una caída en los ingresos. Los varones trans y muchas personas no binarias también enfrentan el costo de menstruar”, consideran.

Se informó que las personas menstruantes gastan entre $1.933 y $4.327 anuales por la menstruación. La inclusión de los tampones y toallitas en Precios Cuidados es un factor crucial. El costo estimado para gestionar la menstruación puede representar entre el 6% y el 10% del ingreso mensual promedio.

Dentro de los desafíos a futuro se encuentran: producir datos e información que sirva al diagnóstico y diseño de las políticas públicas; garantizar el acceso a los productos de gestión menstrual -PGM- e infraestructuras acordes a los servicios de higiene, sanidad y agua, especialmente en las poblaciones socialmente vulneradas; eliminar distorsiones de precios sobre los productos de gestión menstrual y garantizar precios accesibles; promover el acceso a la educación sobre la gestión menstrual; promover la producción de PGM sustentables, investigar el impacto ambiental derivado de su utilización, incentivar el uso de materiales reciclables.

También estuvieron presentes Aldana San José y Mariela Bacigalupo de Jefatura de Gabinete de Ministros; Paula Basaldúa y Mariana Gutiérrez del Ministerio de Desarrollo Productivo; Melina Mallamace del Ministerio de Economía; Marcela Rebón y Erika Roffler del Ministerio de Desarrollo Social; Federico Waltos del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.