Estudios de monitoreo en el Dique San Roque
El Instituto Nacional del Agua (INA) junto a Aguas Cordobesas trabaja en forma conjunta en el programa Permanente de Monitoreo del Embalse San Roque y su Cuenca para obtener información del estado del cuerpo de agua y así conocer sus distintas problemáticas.
El Dique San Roque es una obra histórica ubicada en la costa de la ciudad turística de Villa Carlos Paz, en la provincia de Córdoba y es fuente de abastecimiento de agua potable de toda la ciudad.
En el marco de un proyecto interinstitucional e interdisciplinario, la actividad de monitoreo tiene como objetivo alcanzar un estudio integral de la calidad del agua y de los sedimentos del embalse que permitan generar una base de datos suficiente para el conocimiento y la gestión de la eutrofización que posee el embalse.
Hoy las temáticas referentes a la eutrofización están en agenda de los organismos de gestión tanto a nivel nacional como provincial y este tipo de campañas como la que lleva a adelante el Centro de la Región Semiárida (CIRSA) del INA en la provincia acercan la posibilidad de tomar medidas para solucionar este desafío.
La eutrofización comienza cuando el cuerpo de agua recibe un vertido con nutrientes, como desechos agrícolas o forestales, que favorece el crecimiento excesivo de algas y otras plantas verdes que cubren la superficie.
Este histórico problema es un fenómeno global que tiene una marcada estacionalidad que se agrava por la fuerte presión antrópica y por las condiciones locales. Entre los factores naturales que influyen en este proceso, están las cuestiones climáticas, la ubicación geográfica, la temperatura y la profundidad.
En cuanto al proceso de urbanización en costas y cuenca del embalse San Roque, el mismo ha tenido un desfasaje con el desarrollo de la infraestructura de saneamiento que trajo como consecuencia el incremento de los contaminantes provenientes de efluentes domésticos de diversas localidades.
María Inés Rodríguez, investigadora del INA destacó la importancia del trabajo realizado en los monitoreos de calidad de aguas y opinó que si bien “las respuestas a medidas de gestión demoran en impactar en la calidad del recurso (porque la reversión del proceso de eutrofización muchas veces lleva tiempo y es más lento que el período en que se gesta y manifesta) es esencial la medición del punto de partida de cualquier medida que se instrumente para el control de la problemática”.
En esta línea, la investigadora sostuvo que la dificultad ambiental que se presenta en el Dique “no responde a una única causa sino que es multicausal”, porque los aportes de nutrientes al embalse provienen de diversas fuentes, y se suman variables que agudizan el problema como el cambio climático. “Al ser un problema ambiental complejo, su gestión involucra medidas a corto plazo, mediano y largo plazo en distintas dimensiones espaciales, como lo son la cuenca, el embalse, sus costas y la misma planta potabilizadora, expresó.
Una vez por mes, investigadores del área de Limnología Aplicada y Calidad de Agua del CIRSA-INA, coordinada por María Inés Rodriguez, Marcia Ruiz y Ana Laura Ruibal, realiza junto con Aguas Cordobesas S.A. y la Dirección de Seguridad Náutica de la provincia de Córdoba, las campañas de monitoreo del embalse San Roque y de sus tributarios: el río Cosquín, el río San Antonio, el arroyo Las Mojarras y el arroyo Los Chorrillos.
Las muestras se envían a los laboratorios de Aguas Cordobesas para ser analizadas, a continuación con los datos obtenidos se emite un informe mensual que puede consultarse en el sitio web del INA. Este reporte mensual es elaborado por el equipo del área de Limnología Aplicada y Calidad de Aguas (LAyCA) del INA.