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Estudiantes de Hidráulica Fluvial visitaron el INA y realizaron prácticas en campo

La jornada de vinculación con la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires (FIUBA) contempló la visita a diferentes laboratorios y programas del Instituto Nacional del Agua (INA), capacitaciones y mediciones en el río Matanza-Riachuelo.

El Instituto Nacional del Agua (INA) recibió ayer, en el Polo Hídrico de Ezeiza, la visita de 16 estudiantes de la carrera de Ingeniería Civil de la Universidad de Buenos Aires. Durante siete horas recorrieron los laboratorios, participaron de charlas y capacitaciones y fueron a campo para realizar aforos de caudal.

La jornada, coordinada por el Ing. Leandro Kazimierski, investigador del Laboratorio de Hidráulica del INA y Jefe de Trabajos Prácticos de la asignatura, comenzó con la visita al Programa de Hidráulica Computacional de su laboratorio. Luego, conocieron la nave de Modelos Fluviales, perteneciente al Programa de Hidráulica Fluvial, y la nave de Grandes Modelos del Programa de Hidráulica de Obras. También participaron de una charla sobre calidad de agua y cuidado de ríos y arroyos a cargo de Bárbara Gómez, investigadora del Centro de Tecnología del Uso del Agua del INA.

Para realizar las actividades en campo, los estudiantes recibieron previamente una capacitación en el uso de perfiladores de corriente Doppler acústicos (ADCP, por sus siglas en inglés), instrumentos hidroacústicos que se utilizan para medir la velocidad y la corriente del agua en un rango determinado de profundidad. Con un nuevo RS5 ADCP, un drone con cámara térmica recientemente adquirido y un GPS provistos por el INA, se trasladaron hasta el cruce del río Matanza-Riachuelo y la Autopista Ricchieri donde realizaron una serie de aforos de caudal, observaron la diferencia térmica entre el río y la descarga de la Planta El Jagüel y midieron los niveles con GPS diferencial.

“Después de dos años de pandemia, en los que todo fue virtual, esta fue la primera salida a campo. Este tipo de actividades permite estar en contacto con un río, utilizar instrumentales que se ven durante las clases y enfrentarse a las problemáticas de campo”, explicó Kazimierski.

Pedro Caride, un estudiante que participó en las actividades, contó que “la jornada fue muy productiva. Ver en campo las cosas que estudiamos en la facultad a través de videos es completamente distinto. Surgen complicaciones que no están en los libros y hay que resolverlas”.

El INA tiene vasta experiencia en la aplicación de modelos físicos y numéricos dedicados a grandes problemas de hidráulica fluvial y en trabajos en campo para la toma de datos mediante técnicas modernas de medición de caudales. Esta actividad resulta muy enriquecedora para los objetivos de la materia de Hidráulica Fluvial de la FIUBA, que tiene como objetivo impartir conocimientos sobre la hidráulica aplicada a ríos y canales a fondo móvil.

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