Desde un comienzo, esta gestión, con el ministro Gabriel Katopodis a la cabeza, comprendió a la construcción de acueductos, plantas de tratamiento, plantas potabilizadoras y toda la infraestructura necesaria para garantizar el acceso al agua y al saneamiento, como la base para el desarrollo de la Argentina. Y, sobre todo, como el punto de partida a la hora de construir un país más justo e igualitario.

Este sector de la obra pública es calificado a menudo como “muy ingrato" porque las obras de agua y saneamiento suelen estar bajo tierra, la mayoría no son inauguradas e implican grandes inversiones. Sin embargo, a pesar de que la mayoría no son obras vistosas, desde 2019 el presupuesto del organismo aumentó significativamente, lo que implicó un gran compromiso para el organismo. Ese compromiso se puede ver plasmado en la ejecución del 100% del presupuesto que nos fue asignado en 2022.

El presupuesto anual del ENOHSA hoy supera los $71 mil millones de pesos, en comparación con el presupuesto de la gestión anterior, lo que significa un aumento del 435.5%. Siguiendo los lineamientos establecidos por el Gobierno Nacional, la principal preocupación del organismo fue gestionar estos recursos con el federalismo como principal bandera, sin importar el color político. Una clara muestra de eso es que hay en ejecución obras de agua y saneamiento en todo el país. Es decir, hay presencia Estatal a través de la obra pública en todo el territorio nacional.

Estos datos cobran aún más relevancia si los comparamos con la gestión anterior, en la que el organismo finalizó los cuatro años de gestión con 31 obras en ejecución, un presupuesto aproximado de $21 mil millones y con la mitad de los trabajadores y trabajadoras con los que había comenzado.

Actualmente, el organismo cuenta con cerca de 617 obras en ejecución, 382 finalizadas, 156 a iniciar y 1.037 proyectos que comenzarán en el transcurso de este año y continuarán en 2024. Estamos hablando de un total estimado de 2.192 obras de agua y saneamiento en todo el país. En total, el Estado Nacional invirtió en estos cuatro años $468.603 millones de pesos y, en promedio, finalizó una obra cada tres días.

Gracias al trabajo coordinado entre los municipios, los gobiernos provinciales y el Gobierno Nacional, logramos sumar a millones de argentinos y argentinas a las redes de agua y saneamiento. Concretamente, durante estos años de gestión logramos alcanzar:

• Más de 2,5 millones de beneficiarios de obras de agua potable.
• 1.1 millón son beneficiarios directos.
• 1.9 beneficiarios potenciales.

• Se alcanzará con el servicio de agua al 85,8% de la población.

• Más de 3.1 millones de beneficiarios con acceso al saneamiento.

• 2 millones de beneficiarios directos.
• 1.8 beneficiarios potenciales.
• Se alcanzará con el servicio de saneamiento al 63,2% de la población.

Obras paradigmáticas

En enero, el presidente Alberto Fernandez y el ministro Katopodis inauguraron en Mendoza la planta de tratamiento El Paramillo. Esta planta, que requirió de una inversión de $3.201 millones de pesos, tiene dos características sobresalientes; una de ellas es que se encuentra entre las cinco más grandes del país y, la otra, es que gracias a los equipos de avanzada con los que cuenta, podrá recuperar agua en una zona donde es un bien escaso y volver productivas cuatro mil hectáreas gracias al riego. Se trata de una obra que fue comenzada en la gestión anterior y que en 2019 había tenido un avance de solo el 8%.

Otro dato llamativo de este proyecto es que esta planta fue el tema de la tesis de posgrado de Roberto Formica, el gerente de obras de Agua y Saneamiento Mendoza (AYSAM). Dando cuenta del profundo impacto que tiene la educación pública de calidad en la vida de miles de personas.

Otro ejemplo es la planta de pretratamiento y emisario submarino que comenzó a realizarse a fines del 2022 en Río Grande, Tierra del Fuego, gracias a una inversión que ronda los $2.987 millones. Esta planta cubrirá las necesidades de una gran parte de la ciudad, abarcando una zona estratégica como el parque industrial, uno de los pilares de la economía regional.

Ambos casos muestran la importancia que tiene el desarrollo de la obra pública en Argentina. Estas son inversiones que permiten la generación de miles de puestos de empleo locales, por lo que dan impulso a las economías regionales. Además, son obras claves que disminuyen el impacto ambiental que generan el desarrollo industrial y el crecimiento demográfico.

También se llevaron a cabo proyectos que, si bien no implicaron la ejecución de grandes infraestructuras o presupuestos de miles de millones de pesos, representan un antes y un después en la vida de las personas. En este caso, obras como las veinte cosechas de agua para las comunidades Wichis de Salta, que se ejecutaron entre los años 2020 y 2021, son paradigmáticas. Esta infraestructura le permitió acceder al agua potable a estos argentinos y argentinas que viven en lugares aislados y que siempre sufrieron la falta de este recurso.

Uno de los factores a destacar de este proyecto, y que habla del trabajo que se realiza desde ENOHSA, es que esto se pudo concretar gracias al trabajo en conjunto de diversos actores como el Gobierno Nacional, el Gobierno de Salta, la Mesa de Gestión del Agua Segura y los jefes comunales. Lo que da cuenta de un factor clave, es imposible gestionar, resolver las necesidades de la gente, sin presencia territorial.

Además, el ENOHSA está colaborando en la Causa Lhaka Honhat, en base a lo requerido por el fallo de la Corte Interamericana de DDHH, para asistir en la provisión de agua potable a las poblaciones wichi y criolla de Santa Victoria Este - Salta.

Los desafíos de la gestión del agua ante el cambio climático

En ese sentido, es imposible no hablar del acceso al agua sin mencionar las dificultades que conlleva el impacto del calentamiento global, con temperaturas extremas y sequías históricas que implican un desafío para quienes trabajamos en el estado.

En general, los tiempos burocráticos suelen ir en contramano a las urgencias de las personas. Sin embargo, ENOHSA siempre busca dar respuestas rápidas y concretas ante situaciones de emergencia. Un claro ejemplo, está en los diez camiones cisterna que se distribuyeron el año pasado en Corrientes, Entre Ríos, Salta y Santiago del Estero, como respuesta ante la crisis hídrica. Esto se pudo concretar gracias a una inversión de más de $USD 1.400.000 (un millón cuatrocientos mil dólares), que fueron gestionados a través de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS).

Finalmente, es necesario mencionar el trabajo que se llevó a cabo para resolver con la misma premura todas las problemáticas que implicó la bajante histórica del Río Paraná. En esta oportunidad se gestionaron siete proyectos para las provincias de Chaco, Corrientes, Entre Ríos, Formosa y Santa Fe. Se trata de una inversión que supera los $695 millones de pesos, que tiene como destinatarios a más de 1.700 (un millón setecientos mil) argentinos y argentinas.

Estamos convencidos de que este es el camino a seguir, un camino con desarrollo, trabajo e inclusión. Desde ENOHSA vamos a seguir dando lo mejor para brindar soluciones y sobre todo para poder llevar la obra pública a lo más alto.