El 12 de junio fue establecido por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en 2002 como el Día Mundial contra el Trabajo Infantil con el objetivo de promover la sensibilización y comprometer a los Estados a la concreción de acciones que aboguen por su prevención y erradicación. En 2008, la Argentina sancionó la ley 26.390 de Prohibición del Trabajo Infantil y Protección del Trabajo Adolescente, estableciendo la edad mínima de admisión al empleo en 16 años y disponiendo una serie de condiciones de protección especial hasta la mayoría de edad.

La Argentina ha sido recientemente reconocida como “País Pionero” en el marco de la Alianza 8.7, la coalición internacional que reúne a Estados Miembros de Naciones Unidas comprometidos con mejorar los esfuerzos contra del trabajo forzoso, la esclavitud moderna y la trata de personas. En dicha ocasión, la Directora de la Oficina de la OIT para la Argentina, Yukiko Arai, extendió sus felicitaciones al gobierno nacional y a sus socios institucionales del sector empleador y sindical, subrayando que “el status de Argentina como País Pionero de la Alianza 8.7 representa un reconocimiento internacional a las acciones sostenidas a lo largo de los años, y al mismo tiempo significa más obligación y un compromiso a nivel país, regional y mundial para recordar nuestros compromisos y doblar esfuerzos hacia la prevención e erradicación de trabajo infantil y forzoso y trata de personas”.

Asimismo, Arai enfatizó “Argentina es ejemplar por sus marcos normativos robustos, por sus políticas, y ha ratificado todos los convenios de derechos fundamentales. Quisiera reiterar nuestro compromiso continuo para acompañar al país en este desafío.”

Este reconocimiento a la Argentina por adoptar legislación y establecer políticas públicas, mecanismos de coordinación y voluntad política para promover nuevos enfoques, se suma a la calificación que viene obteniendo nuestro país por el Informe Mundial sobre Trata de Personas que realiza el Departamento de Estado de los EEUU, en el que posiciona a la Argentina entre las primeras 30 naciones sobre 180.

El trabajo infantil en la Argentina ha sido frecuentemente encontrado en el trabajo temporario e intensivo de horticultura y fruticultura, en muchos casos ante el engaño al trabajador adulto, al que se le ofrece un determinado salario, el que luego queda atado a un tope de producción a destajo y, al no poder llegar a ese tope, los empleadores suelen involucrar a todo el grupo familiar para poder alcanzar la meta dispuesta, a cambio de un solo salario. En los últimos tiempos, también se ha incrementado el hallazgo de casos al interior de organizaciones coercitivas, con sometimiento de menores a explotación tanto sexual como laboral.

Cabe mencionar que la Unidad de Registración y Fiscalización del Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (RENATRE) informa que, entre 2020 y 2023 se detectaron 30 niños/as realizando trabajo infantil prohibido y 51 adolescentes en la misma situación. Desagregando las cifras, fueron 4 niños/as en 2020, 6 en 2021, 13 en 2022 y 7 en lo que va de 2023. En cuanto a adolescentes: 5 en 2020, 23 en 2021, 13 en 2022, y 10 en el período de 2023.

Por su parte, desde el Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas Damnificadas por el Delito de Trata del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, se informa a su vez que en el año 2023, hasta el mes de abril, fueron rescatados 39 menores de edad víctimas de trata y explotación, una alta cifra en comparación con los 42 menores de 2022 y los 13 rescatados en 2021.