En la época de mayor riesgo de quemas forestales, y en cumplimiento de los convenios firmados entre los ministerios de Defensa y de Seguridad de la Nación, comenzaron los operativos de la Aviación de Ejército en distintas partes del país.

Con dicho despliegue, los helicópteros –que constituyen el medio más versátil y apto para este tipo de siniestros de rápida evolución– estarán disponibles en forma inmediata y en cualquier zona del territorio, posibilitando así una respuesta eficiente.

Las aeronaves, pertenecientes al Batallón de Helicópteros de Asalto 601, con asiento en Campo de Mayo, se destinarán a operaciones de protección civil y brindarán apoyo al Sistema Federal de Manejo del Fuego, así como también a otros organismos nacionales y provinciales.

Uno de los helicópteros tendrá base en La Pampa para cubrir la región central del país; otro permanecerá en Mendoza y su zona de cobertura será la parte norte de la Patagonia, y el tercero estará en Salta, con injerencia directa en todo el noroeste. El radio de operación será de nivel regional.

Los equipos se mantendrán siempre operativos y las tripulaciones serán relevadas cada 15 días. Los elementos de mantenimiento de las aeronaves –que estarán expuestas a altas exigencias– permanecerán alistados en Campo de Mayo - Buenos Aires y, en caso de que alguno de los helicópteros registre un problema, se trasladarán a cualquier punto del país con los aviones disponibles.

Las actividades serán principalmente aeromóviles. Los efectivos del Ejército se encargarán de transportar al personal, como por ejemplo a los brigadistas, acelerando su traslado de un lugar a otro y facilitando su llegada a sitios poco accesibles, como montañas y bosques muy tupidos.

Además, podrán efectuar controles aéreos, en los que el jefe del operativo, que no es de la tripulación de Ejército, se mantendrá en vuelo y redireccionará a los grupos de brigadistas que combaten el fuego en el terreno.

Por último, también asistirán en la evacuación de brigadistas o individuos que queden aislados a causa del fuego o el humo. Si bien el helicóptero no está preparado para evacuaciones sanitarias, puede hacer una primera evacuación de emergencia hasta algún punto de atención inmediata.

Es de señalar que esta unidad tiene un despliegue territorial en todo el país y que la Aviación está presente desde 1987 en el apoyo en situaciones de crisis y catástrofes naturales. En los últimos años, ha prestado asistencia en varias ocasiones, particularmente en los incendios de la Patagonia, La Pampa, Entre Ríos y Córdoba, entre otras zonas.

Entrenamiento previo al despliegue

Antes del despliegue, se realizaron tareas de adiestramiento de las tripulaciones y de adaptación de los equipos a los sitios reales de empleo. Por otro lado, se alistaron las aeronaves con su mantenimiento preventivo.

Los integrantes de la tripulaciones se entrenaron en simuladores de vuelo, donde, además de familiarizarse con el terreno y sus condiciones meteorológicas, practicaron emergencias en vuelo de alto riesgo con presencia de humo, cenizas, calor extremo, viento, poca visibilidad, etc.

La preparación también incluyó clases teóricas y prácticas con bomberos y médicos de emergencias, a fin de proporcionar un enfoque global que permita a los efectivos de Ejército actuar con eficiencia en el apoyo a otros organismos en situaciones extremas.

¿Qué es el Plan Nacional de Manejo del Fuego?

Fue concebido en 1996 con el objetivo de luchar contra los incendios declarados en áreas naturales o rurales. Depende de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación.

Para su mejor cobertura, se divide al país en áreas operativas:

• Noroeste (Jujuy, Salta, Catamarca y Tucumán)
• Norte (Santiago del Estero, Santa Fe, Chaco y Formosa)
• Noreste (Entre Ríos, Corrientes y Misiones)
• Centro (Córdoba, San Juan, San Luis y La Rioja)
• Pampeana (Buenos Aires, Mendoza y La Pampa)
• Patagonia (Río Negro, Neuquén, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego)