En el histórico Salón Felipe Vallese de la Confederación General del Trabajo, se llevó a cabo el Encuentro de Mujeres Trabajadoras del Transporte, en el marco de la conmemoración del 23 de septiembre: Día Internacional contra la Explotación Sexual y la Trata de Mujeres, Niños y Niñas.

Dio inicio al evento Pablo Moyano, secretario general de la CGT, y vicepresidente mundial de la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte (International Transport Workers Federation, ITF), quien brindó un cálido saludo a los concurrentes. En igual sentido se expresó Edgar Díaz, del staff de la ITF. A continuación, Gustavo Vera, director del Comité de Lucha contra la Trata de Personas, expresó su agradecimiento a las compañeras trabajadoras reunidas y explicó el sentido histórico de la conmemoración del 23 de septiembre, en recordación de la primera norma contra la explotación sexual en el mundo, la que sirvió de ejemplo para el resto de los países.

Vera explicó la importancia del Movimiento Obrero impulsando esa legislación. Hacia fines del siglo XIX, los sindicatos anarquistas contaban incluso con un periódico, “La Voz de la Mujer”, que se editó entre los años 1896 y 1897, con reclamos específicos contra la explotación de las mujeres, denunciando la complicidad estatal con el proxenetismo, y sentando las bases para que en 1913 se lograra la sanción, por parte del diputado socialista Alfredo Palacios, de la ley que lleva su nombre. El director del Comité explicó luego la importancia del Estatuto del Peón Rural, aprobado en octubre de 1944, a instancias de Juan Domingo Perón, otorgando dignidad a los trabajadores rurales y constituyéndose en una antesala del 17 de octubre de 1945.

Vera detalló que los sindicatos de la actividad del transporte fueron esenciales en el contexto de la reciente pandemia, sea para el traslado de vacunas y alimentos, como también para la concientización y difusión de la línea 145. Hubo en la Argentina 966 personas rescatadas durante la pandemia, con lo que se salvaron literalmente una enorme cantidad de vidas. En ese sentido, explicó Vera, la tarea de los trabajadores del transporte en la lucha contra la trata ha sido constante. No solo en la difusión de las líneas de denuncia y asistencia. El director del Comité relató casos como el de un trabajador de Chubut que pudo rescatar a una víctima de trata, y la labor del sindicato de Camioneros de Entre Ríos, que acogió a trabajadores/as explotados laboralmente por una organización coercitiva. Vera también explicó cómo se profundizó la articulación entre trabajadores del transporte a nivel global, a partir de dos importantes encuentros en el Vaticano con la ITF, en los que participaron sindicatos de tierra, mar y aire de todo el mundo.

Participaron del encuentro: Graciela Aleña, del Sindicato de Viales; Adriana Monje, de UDOCBA; Karina Moyano, del Sindicato de Camioneros; Daniela Pantalone, de Aeronavegantes; Karina Benemérito, de la Unión Ferroviaria; y Andrea Privatti del Staff de la ITF.

Aleña expresó que “en algunas zonas de nuestro país había mucha resistencia a la participación de la mujer en el sindicalismo. Cuesta la participación de las mujeres, y muchas veces se generan tensiones. Necesitamos mayor amplitud para que la participación de la mujer crezca cada vez más. Quienes amamos la vida sindical, tenemos que seguir reforzando el rol de la mujer para lograr un equilibrio, y evitar el sectarismo. Ir hacia la igualdad, reforzar y seguir trabajando en todo el país”. Por su parte, Karina Benemérito resaltó que “las mujeres hoy ocupamos lugares que antes solo ocupaban los varones y esto es gracias al movimiento obrero organizado. Las mujeres tenemos dos trabajos: uno es pago y otro no. Pero igual lo tenemos que hacer”. A su turno, Adriana Monje destacó la importancia de la participación de las delegadas, el rol de muchas mujeres en la conducción de las organizaciones sindicales, y reclamó un cupo en todas las organizaciones sindicales. Karina Moyano explicó que en 2008 se creó la Secretaría de la Mujer, con la que se favoreció la incorporación, la capacitación y la participación comenzó a crecer. Destacó la presencia de más de 10.000 mujeres en toda la organización sindical, 16 en la Secretaría General, y más de 200 conductoras de camiones. Daniela Pantalone se refirió a la “inclusión a la inversa”, la necesidad incluir hombres en determinados roles. Andrea Privatti hizo mención a la invisibilidad femenina en algunos lugares de trabajo y reclamó igualdad en cuanto a las oportunidades de trabajo y capacitación.