Esta línea de acción se dirige a organizaciones de familias productoras que practiquen la agricultura, ganadería y pesca como su principal actividad, con el objetivo de promover su transición de la producción de subsistencia a una de orientación comercial. Financia inversiones que permitan a las familias beneficiarias generar ingresos autónomos sostenibles, así como la adopción de tecnologías de agricultura climáticamente inteligente (ACI) para aumentar la productividad y la resiliencia de los productores y las productoras. Ello incluye inversiones en bienes de capital y equipamiento, insumos y capital de trabajo, asistencia técnica y mejoras en las viviendas rurales orientadas a resolver Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI).
Características de la ejecución
Ejecución: Centralizada y descentralizada, a través de un Acuerdo de Participación provincial.
Beneficiarios: Organizaciones formales e informales de productores y productoras de la agricultura familiar que se encuentren entre los sectores más vulnerables de la población rural.
Montos: Hasta USD 250.000 por organización beneficiaria, con un límite para inversiones colectivas de hasta USD 10.000 por familia beneficiaria y de hasta USD 5.000 por familia beneficiaria para inversiones prediales individuales. La contraparte equivale al 10% del proyecto.
Destino: Financiamiento para inversiones vinculadas al incremento de la productividad, incorporación de pautas de manejo, procesamiento de la producción, incorporación de bienes y maquinaria, mejoras en las viviendas de la población rural.
Algunos ejemplos de proyectos en esta línea
- Maquinaria, implementos y equipamiento para el aumento del volumen de producción, como así también de la eficiencia de los recursos utilizados.
- Infraestructura para el procesamiento de la producción (galpones, sistemas de acopio y equipamiento).
- Infraestructura para el buen manejo productivo (corrales, mangas, bañaderos para ganadería, alambrados, etc.).
- Infraestructura y equipamiento para la elaboración de alimentos u otros productos (agroinsumos, artesanías, indumentaria, etc.).
- Mejoras en las viviendas de las familias productoras (electricidad, conectividad, núcleos húmedos, etc.).