Mónica Ruz
Mónica Ruz tiene setenta años, y hoy vive en Alta Gracia, Córdoba.
En 1971 se enamoró, y quedó embarazada de su novio, que tenía trabajo en otra provincia. Su familia no la apoyó, y obligaron a Mónica a ocultar su embarazo. Tuvo a su hijo en abril de 1972, en un domicilio en la ciudad de Córdoba al que la llevó su familia, donde atendía la partera Flora Muñoz.
La partera, en connivencia con la familia de Mónica, le dijo que su hijo, un varón, nació muy grave, y que falleció horas después del nacimiento. No le mostraron el cuerpo. Mónica vio llorar a su hijo recién nacido, de apariencia saludable, y siempre dudó de esa versión. Muchos años más tarde comprobó, por un testimonio familiar, que tenía razón. Su hijo estaba vivo.
Los años transcurrieron y Mónica y su marido tuvieron tres hijos más. Junto a una de sus hijas, empezó la búsqueda de su hijo robado. Conoció un grupo de madres que, con distintas historias, se encuentran en la misma situación: buscan a sus hijas o hijos de los cuales fueron separadas al momento del nacimiento. En ese espacio encontró apoyo, contención, y una nueva perspectiva sobre su situación y su búsqueda. “Ya no estoy sola en este viaje”, dice. Quiere ayudar a otras mujeres que pasaron por una situación similar. Las invita a acercarse, a hablar, a buscar a sus hijos y a “salir a la vida”.
Mónica espera reencontrase con su hijo, que hoy tiene 50 años. Quiere que sepa que nunca quiso entregarlo, y que tiene hermanos por conocer. Es importante, dice, “que todos los seres humanos conozcan su identidad”.
Conocé la historia de búsqueda de Mónica en el siguiente video.