Qué es, cuáles son los síntomas, cómo se transmite, se trata y se previene la hidatidosis.

¿Qué es?

La hidatidosis es una enfermedad producida por un parásito llamado Echinococcus granulosus que transmite el perro a través de su materia fecal.

¿Cómo es el ciclo de transmisión?

Cuando el perro infectado defeca, elimina junto a sus heces, miles de huevos del parásito que contaminan el agua, el pasto, la tierra, las verduras y hasta quedan adheridos en el pelo, que luego el animal lame, permaneciendo en la boca/lengua del mismo. Estos huevos liberados en el ambiente son ingeridos, más comúnmente por animales de producción (oveja, vaca o cerdo), ingresando al organismo y esparciéndose en los órganos, principalmente pulmones e hígado, donde se forman los quistes (quistes hidatídicos), en cuyo interior se aloja el parásito.
Si el perro luego ingiere vísceras con quistes hidatídicos, en su intestino se forman otra vez los parásitos, y empieza el ciclo nuevamente.

¿Cómo se transmite a las personas?

La infección se produce cuando los huevos del parásito llegan a la boca de las personas (principalmente de los niños) y esto ocurre por actividades como: gatear en un ambiente contaminado, darle besos al perro, dejarse lamer por el perro, comer verduras contaminadas, tomar agua contaminada, entre otras.

¿Cuáles son los síntomas?

Las personas enfermas desarrollan quistes en el hígado y los pulmones, principalmente, aunque también pueden llegar a otros lugares del cuerpo. Las personas con quistes hidatídicos pueden no tener síntomas durante muchos años (son portadores asintomáticos) hasta que estos aumentan su tamaño y comienzan a aparecer, que varían según la ubicación de los quistes.

¿Cómo es el tratamiento?

En personas: los quistes pequeños se tratan con medicación, pero si alcanzan un gran tamaño se debe recurrir a la cirugía. En perros: se realiza un tratamiento con antiparasitario para evitar la eliminación del parásito por materia fecal.

¿Cómo se puede prevenir?

• Evitar alimentar a los perros con achuras crudas.
• Desparasitarlos cada 45 días.
• Mantenerlos lejos de los lugares donde se carnea a los animales.
• Lavar con agua potable y a chorro fuerte las frutas y verduras antes de consumirlas.
• Evitar que los perros laman a los niños en la boca.
• Evitar que los niños se lleven tierra o arena a la boca.
• Lavarse bien las manos, después de tocar un perro, antes de comer y tantas veces como sea necesario.
• Cercar las huertas para que no entren los perros.