Se encargaban de la recolección, limpieza y embalaje de verduras. Hombres, mujeres y niños dormían en viviendas precarias, construidas con chapas y maderas, en la misma finca donde debían trabajar.

El personal de la División Trata de Personas de la Policía Federal comenzó a trabajar a partir de un procedimiento de AFIP el pasado mes de septiembre, que alertó sobre la situación. Frente a ello, los uniformados tomaron vistas fotográficas y realizaron vigilancias discretas sobre el campo “El Bordó”, ubicado sobre el camino de tierra Ruta Vieja de la localidad salteña de Apolinario Saravia.

Con todos los datos que surgieron, se llevó a cabo el allanamiento del lugar. Allí se comprobó que 38 ciudadanos argentinos y bolivianos (diez de ellos menores de edad) debían trabajar la tierra en condiciones insalubres y sin los requisitos mínimos de seguridad. Los haberes estaban supeditados a los vegetales recolectados, en tanto que no se hallaron las ropas ni los elementos adecuados para enfrentar las altas temperaturas.

Además de tener que dormir en viviendas precarias, la zona no cuenta con tendido de energía eléctrica ni agua potable. Los baños consistían en espacios tipo letrinas en los que se cerraba una parte de la tierra con lonas. Los niños, por su parte, tenían las mismas responsabilidades que los mayores.

A continuación, los efectivos allanaron la casa del propietario de la finca, donde lo arrestaron e incautaron 290 mil pesos en efectivo. En otro operativo, en búsqueda de uno de los cómplices, decomisaron más de un 1.400.000 pesos, un arma de fuego y documentación que será de vital importancia para la causa judicial.