Recorrido guiado por "Ciudad Oculta", la exhibición en el Centro Cultural Borges
La propuesta “Panorámicas” plantea una visita por la exposición fotográfica, guiada por su autor Nahuel Alfonso, que acerca una mirada alternativa sobre las villas y sus habitantes.
El viernes 23 de junio a las 18 h, en el tercer piso del Centro Cultural Borges (Viamonte 525, ciudad de Buenos Aires) se llevará a cabo un nuevo encuentro del ciclo Panorámicas, en el que se recorrerá la muestra Ciudad Oculta, con la guia de su autor el fotógrafo Nahuel Alfonso.
Panorámicas propone recorridos de corta duración por los distintos espacios del Centro Cultural Borges. Los encuentros tienen lugar en las salas de exhibición, en una hora previamente pautada, y son abiertos a todo público. Se realizan en compañía de una persona mediadora para conversar, en profundidad, sobre las diversas temáticas ligadas a las exhibiciones en curso.
Una primera versión de este trabajo se exhibió en agosto de 2017 en el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti. En esta oportunidad, gracias al Programa Federal de Itinerancias del Conti, se expone, por primera vez, en el Centro Cultural Borges la versión completa de Ciudad Oculta, que puede visitarse, hasta el domingo 30 de junio, de miércoles a domingo de 14 a 20 h.
El recorrido, de aproximadamente 30 minutos, permitirá conocer, más en profundidad, las historias que emergen sobre las villas y sus habitantes.
Nahuel Alfonso vivió parte de su infancia en Ciudad Oculta, donde conoció la fotografía. En 2010, cuando los noticieros reproducían una mirada sesgada y estigmatizante de las familias que ocupaban el Parque Indoamericano, decidió mirar a través de su cámara para dar inicio a un ensayo fotográfico que busca acercar y retratar, desde otra perspectiva, la identidad y la dignidad de la villa y sus habitantes.
¿Cómo nace en vos la vocación por la fotografía?
La vocación por la fotografía nace cuando iba a la Fundación PH15, a los 20 años, que me acercó la cámara para que pueda hacer fotos, me dio los rollos y así fui descubriendo como se hace, fui entendiendo, me encantó y me quedé ahí.
¿Qué te llevó a mostrar la realidad de Ciudad Oculta?
Con los talleres de PH15 ya hacía fotos sobre Ciudad Oculta, pero el punto fuerte fue la toma del Parque Indoamericano y la estigmatización de los medios de comunicación masiva hacia la gente de las villas. Ese fue el disparador, querer hacer algo distinto a esa mirada tan fea que había y que todavía sigue habiendo, y aportar una mirada distinta sobre la vida en las villas.
¿Con qué historias se puede encontrar el público?
Ahí van a poder ver fotos de mi familia, de los pasillos, con un sentido más poético. También hay un sector donde se encuentran expuestas fotos, de cuando yo tenía 14 años, cuando entré, por primera vez, a PH15, me quedé tres meses y volví a los 20. Son esos primeros rollos. Y hay un sector, para la memoria, del Elefante Blanco con fotos de todos los chicos que pasaron por los talleres de PH15 y muestran los distintos costados del edificio.
Sobre Ciudad Oculta
Ciudad Oculta es el nombre con que es conocida la Villa 15, asentamiento de emergencia localizada en el barrio de Villa Lugano, al sur de la Ciudad de Buenos Aires. Habría comenzado hacia el año 1937 como un barrio de obreros del cercano Mercado de Hacienda de Mataderos, de las empresas ferroviarias y del Frigorífico Lisandro de la Torre. Luego creció paulatinamente a través de las siguientes décadas.
Respecto al nombre, hay al menos dos versiones sobre su origen: una versión afirma que se habría comenzado a llamar “Ciudad Oculta” a partir del Mundial de Fútbol de 1978, que tuvo lugar en la Argentina de la dictadura cívico-militar. La intendencia del brigadier Osvaldo Cacciatore había construido entonces un muro para esconder la villa de emergencia de los ojos de los turistas extranjeros.
Otra versión cuenta un origen anterior. Se dice que las primeras casas de la villa se construyeron detrás de los muros de una fábrica de cuero que había quebrado y estaba abandonada, y daba sobre la antigua Avenida del Trabajo. Entonces, desde Avenida del Trabajo no podía observarse en forma directa el asentamiento. En palabras de un vecino: “Cuando pasaba por Avenida del Trabajo no veía nada, pero si entrabas, estaba todo el barrio. Es por eso que era como una ciudad oculta, y de ahí, el nombre”. Donde empezaba “la villa” estaba la vía del tren, allí terminaban las edificaciones típicas de un barrio de casas bajas de clase media.
Imagen portada: Jesica Echarri