Nuevos informes de la ONU sobre drogas destacan los avances del país
Los mismos detallan diversas iniciativas y políticas argentinas en la materia.
La Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes de las Naciones Unidas (JIFE), durante la reunión informativa para las Misiones en Viena, presentó el “Informe Anual” y el “Informe de Precursores y Sustancias Químicas frecuentemente utilizados para la Fabricación Ilícita de Estupefacientes y Sustancias Sicotrópicas” correspondientes al 2017.
En este sentido, los mencionados informes detallan diversas iniciativas y políticas argentinas equilibradas en materia de drogas, reflejando un enfoque basado en los Derechos Humanos, junto con la aplicación de los Tratados de fiscalización internacional de drogas.
Entre los avances argentinos destacados por la JIFE, se resaltan:
· El establecimiento del Consejo Federal de Precursores Químicos, como órgano asesor del Registro Nacional de Precursores Químicos (RENPRE), dependiente de este Ministerio de Seguridad;
· Las modificaciones de la Ley 23.737, penalizando el desvío de precursores hacía la fabricación de estupefacientes, actualizando las penas por producción, comercialización y cultivo de drogas y estableciendo nuevas medidas de control fronterizo para combatir el tráfico de drogas;
· El Sistema de Alerta Temprana, aplicado desde la SEDRONAR, con colaboración de este Ministerio de Seguridad, en cuanto para la detección precoz de nuevas sustancias psicoactivas, drogas emergentes y nuevos patrones de consumo;
· Y la Ley 27.319 de Investigación, Prevención y Lucha contra los Delitos Complejos, aprobada en noviembre de 2016, la cual contiene disposiciones relativas a las técnicas especiales de investigación.
Es menester resaltar que cada avance mencionado por la JIFE se da en el marco del trabajo conjunto que la Subsecretaría de Lucha contra el Narcotráfico y la Dirección Nacional de Cooperación Regional e Internacional de la Seguridad mantienen para dar cumplimiento con las obligaciones internacionales, entre las que se encuentra la remisión –en tiempo y forma– de los formularios que sirven de base para la elaboración de los referidos informes, llevando a cabo una política de combate contra estos flagelos integral y global.
