Antes del inicio del Programa Libro % durante la 50.ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, la Secretaría de Cultura de la Nación y la CONABIP distribuirán más de 12 mil libros que la editorial Penguin Random House decidió donar para la red nacional de bibliotecas populares.

A través de acuerdos de colaboración con los delegados provinciales se buscará que el envío a todas las instituciones se complete en marzo o principios de abril. Las obras, de diversos títulos y autores, inyectarán nuevo y diverso material bibliográfico a los acervos de todo el país, garantizando el acceso a la lectura en cada comunidad.

La intención de distribuirlos estos meses responde a la etapa de planificación necesaria para que las instituciones puedan evaluar las necesidades de sus usuarios antes de solicitar las nuevas adquisiciones en la 21.ª edición del Programa Libro %.

“Agradecemos especialmente a Penguin Random House por sumarse como socio estratégico de nuestras políticas culturales. Cuando el sector privado se compromete y el Estado ordena, planifica y acompaña, los resultados se multiplican. Esta donación fortalece la red federal de bibliotecas y amplía el acceso a la lectura en cada comunidad. Este es el camino: trabajar juntos para que la cultura llegue más lejos y a más argentinos”, expresó el secretario de Cultura de la Nación, Leonardo Cifelli.

Por su parte Raul Escandar, presidente de la CONABIP, destacó “la importancia de que editoriales de renombre como Penguin Random House generen alianzas y fortalezcan el trabajo cotidiano de las bibliotecas populares de todo el país, que mediante un compromiso inclaudicable abren sus puertas día a día para que miles de personas tengan acceso al maravilloso mundo de los libros, la lectura y la cultura federal”.

Proceso de clasificación y curaduría bibliográfica.

Para garantizar la equidad en la distribución a lo largo de toda la red federal de bibliotecas populares se clasificará el material recibido, asegurando una representación balanceada de géneros (ficción, poesía, ensayo, literatura local) y la adecuación a los distintos rangos etarios (desde literatura infantil y juvenil hasta acervos para adultos y especializados).

De esta manera se busca maximizar el impacto cultural de cada ejemplar, para que las bibliotecas reciban colecciones que satisfagan tanto las necesidades y pedidos como los diversos perfiles de lectores de las comunidades a las que sirven.