Tomamos una decisión: reforzar las fronteras para combatir el tráfico de drogas y el crimen organizado. Con esa convicción, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, viajó junto a funcionarios de su cartera a las provincias de Salta y Jujuy, para poner en marcha diferentes programas de seguridad. 

Vamos a ir paso a paso, trayendo más efectivos de Gendarmería, mayor tecnología e infraestructura. En primer lugar, tenemos prevista la instalación de drones y aviones radarizados para controlar las fronteras del norte del país.

Asimismo, vamos a implementar todas las acciones necesarias para erradicar el narcotráfico, un flagelo que se ha configurado como una forma de vida para muchas personas que residen en las regiones fronterizas, resultado de falta de controles. Por eso, concentraremos recursos económicos, tecnológicos y humanos en la zona.

Por otra parte, hemos presentado los Centros de Inteligencia Criminal Regionales (CICRE) que estarán distribuidos en siete regiones en del territorio nacional: NOA, NEA, Cuyo, Centro, Buenos Aires, Patagonia Norte y Patagonia Sur. 

Estos centros, que funcionarán como nexos con las fuerzas policiales, forman parte de la estructura de la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal (DNIC) dentro del marco del Subsistema de Inteligencia Criminal (SICRI). El objetivo es fortalecer la lucha contra el delito complejo desde un enfoque federal.

Finalmente firmamos con el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, un convenio para la creación de un Centro Integral de Monitoreo y un Centro de Bioseguridad en la ciudad de La Quiaca, y debatimos la posibilidad de la adhesión de Jujuy a la Ley de Desfederalización del Narcomenudeo.

La comitiva estuvo integrada por el secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco; el secretario de Seguridad Interior, Gerardo Milman; y el subsecretario de Investigación del Delito Organizado y Complejo, Juan Patricio Furlong.