Presidencia de la Nación

El Ministerio de Salud de la Nación y la Organización Panamericana de la Salud difunden recomendaciones ante el brote de dengue

Para la prevención y control del dengue es fundamental la eliminación de los criaderos del mosquito Aedes aegypti, el diagnóstico precoz, la atención oportuna de los pacientes, la vigilancia epidemiológica y la participación comunitaria.

A raíz del aumento de la circulación del virus del dengue en la región de las Américas y en el país, el Ministerio de Salud de la Nación y la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS) destacan la importancia de fortalecer las acciones de control del mosquito Aedes aegypti que infectado puede transmitir la enfermedad, además de fortalecer la organización de la red de servicios de atención a fin de contar con un diagnóstico precoz y el tratamiento adecuado para prevenir complicaciones.

“Desde el Ministerio de Salud de la Nación promovemos el trabajo conjunto con las distintas jurisdicciones afectadas por el brote de dengue, manteniendo la sala de situación epidemiológica en forma permanente”, manifestó el ministro de Salud de la Nación, Mario Russo.

Por su parte, la representante de OPS en Argentina, Eva Jané Llopis afirmó: “Desde OPS Argentina brindamos cooperación técnica al país colaborando en las distintas líneas recomendadas por OPS/OMS para abordar y prevenir el dengue: el refuerzo de la vigilancia, la eliminación de mosquitos y sus criaderos, el apoyo a la organización de los servicios de salud, el manejo clínico para una rápida detección y abordaje de los casos y el trabajo conjunto con las comunidades”.

El dengue es una enfermedad que se transmite por la picadura de un mosquito Aedes aegypti infectado con uno de los cuatro serotipos del virus del dengue. Los síntomas frecuentes incluyen: fiebre, enrojecimiento e inflamación de la piel, y dolor intenso de cabeza, detrás de los ojos, en músculos y articulaciones. Informar de estos puede ayudar a un diagnóstico y tratamiento tempranos.

Es importante saber que esta enfermedad puede tener formas graves y causar la muerte. En caso de presentar alguno de los signos de alarma como dolor abdominal intenso y continuo; mareo o desmayo; vómitos persistentes; somnolencia; intranquilidad o irritabilidad; sangrado en encías, vómitos, orina o heces se debe acudir a un centro de salud de inmediato.

En cuanto a las medidas a considerar, la eliminación de los criaderos de mosquitos se realiza en domicilios y en espacios comunes. Para ello es necesario tirar, dar vuelta o higienizar con frecuencia los recipientes que acumulan agua, aunque sean pequeños, tanto dentro como fuera de las viviendas. También, tapar o cubrir con tela mosquitera los grandes contenedores como tambores o tanques elevados y limpiar canaletas. Es importante cepillar los bebederos y cambiar el agua diariamente. Las piletas de natación se deben mantener cloradas y cuando no se utilizan, cubiertas. La participación de toda comunidad y la constancia en estas tareas es fundamental.

En las áreas donde hay transmisión activa del dengue se recomienda eliminar mosquitos adultos mediante insecticidas para detener y cortar la transmisión. Esta acción requiere de personal entrenado para que las acciones sean eficaces y a la vez evitar el desarrollo de resistencia del mosquito al insecticida. Además, se aconseja el uso de repelentes según las indicaciones de los fabricantes, como medida de protección individual permanente mientras continúen los casos.

Respecto de la vacuna contra el dengue, aprobada en Argentina por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) en abril de 2023, actualmente la OPS no recomienda que se incluya la vacuna del dengue en los programas de inmunización de los países.

Sin embargo, en áreas geográficas subnacionales específicas donde se considere introducir la vacuna, su implementación debe estar acompañada de medidas cuidadosas para garantizar la evaluación, el seguimiento de la seguridad y efectividad de la vacuna; así como también, que las comunidades y profesionales sanitarios implicados estén plenamente informados de los posibles beneficios y riesgos.

En este sentido, Russo expresó: “Luego de múltiples revisiones con las sociedades científicas y referentes de sectores académicos de infectología concluimos que en un contexto de brote como el actual, la vacuna no está recomendada como estrategia de Salud Pública para evitar la propagación de la enfermedad, debido a que la misma requiere de 2 dosis, con un intervalo de 3 meses para alcanzar una adecuada protección para la población”.

“Desde el Ministerio de Salud continuaremos trabajando intensamente para tomar las medidas sanitarias más convenientes y oportunas, que den solución sanitaria a la problemática de esta enfermedad que desde el año 2023 ya es endémica en el país, y analizando la evidencia científica para determinar la conveniencia de un programa de inmunización en aquellas zonas más afectadas”, destacó el ministro.

En este momento, la estrategia recomendada por el Ministerio de Salud de la Nación y la OPS/OMS para prevenir y controlar las enfermedades transmitidas por mosquitos continúa estando centrada en la colaboración entre la comunidad y los equipos de salud. Las acciones clave incluyen el control del mosquito transmisor, la prevención de picaduras, una atención oportuna y adecuada de los casos, y el compromiso continuo de las comunidades. La implementación integrada y simultánea de estas acciones reducirán los riesgos asociados no solo al dengue, sino también a otras enfermedades transmitidas por el mosquito (Aedes aegypti) como zika y chikungunya.

Para más información: https://www.paho.org/es/temas/dengue
https://www.argentina.gob.ar/salud/glosario/dengue

Scroll hacia arriba