Día Nacional del Actor
Al conmemorarse su día en Argentina, desde la Secretaría de Cultura de la Nación compartimos un repaso por los inicios y la trascendencia de esta fecha tan especial.
En 1991, la Asociación Argentina de Actores y Actrices comenzó a entregar los Premios Podestá para homenajear a los miembros de la comunidad artística. Más tarde, en 1992, el Senado de la Nación sumó su participación mediante la entrega de un Diploma de Honor a los galardonados. Entonces, se fijó como fecha de realización del acto de los Premios Podestá el segundo lunes de mayo.
En septiembre de 1992, se aprobó la Ley 24.171. Entonces, se declaró el Día Nacional del Actor, en coincidencia con la fecha original de entrega de los Premios Podestá a la Trayectoria Honorable.
Al celebrarse el Día Nacional del Actor, desde la Secretaría de Cultura evocamos algunos hitos e historias protagonizadas por nuestros artistas.
Se trata de una profesión que se remonta a tiempos de antaño, desde Grecia y la antigua Roma. A nivel mundial, también tiene su Día Internacional del Actor, que se celebra el 26 de agosto en conmemoración del actor del siglo III, Ginés de Roma, considerado santo mártir por la Iglesia católica. Mientras que en la Argentina cada segundo lunes de mayo se conmemora el Día Nacional del Actor.
Los Podestá: el origen
Esos premios fueron acuñados con el apellido de cierta dinastía actoral rioplatense y en honor a aquella familia germen de esta celebración. Siendo artistas precursores del circo criollo, fundadores de la "Compañía de los Hermanos Podestá": así sentaron las bases y abrían paso al reconocimiento para quienes se dedican a la profesión.
Hedy Crilla: una maestra, muchos discípulos
Dedicarse a la actuación profesional suele requerir de mucho trabajo y formación; ya sea mediante estudios en el Conservatorio, academias o talleres particulares que forjan la senda de sus futuros artistas. En ese sentido sobresale el caso de la referente, actriz y docente austríaca, Hedy Crilla.
Exiliada en Buenos Aires durante 1940, Crilla fue pionera para el país del método Stanislavski, con la técnica Strasberg: marcó cierto camino desde lo generacional formando a maestros, directores y actores -por entonces jóvenes talentos- quienes luego extendieron ese legado educativo hacia sus propios alumnos. Entre ellos, algunos emblemáticos: Agustín Alezzo, Augusto Fernandes, Carlos Gandolfo, Norma Aleandro, Betiana Blum, Federico Luppi y Lito Cruz.
Su papel más vigente
De manera predominante con Mario Soffici, Crilla actuó en el cine nacional; en 1947 fundó la Escuela de Arte Escénico de la Sociedad Hebraica Argentina, de allí surgieron celebridades como Sergio Renán, David Stivel, Fanny Mikey, etc.
Hay una curiosidad que se reactualiza al cumplirse este 2025 los 40 años del estreno de la película Esperando la carroza (1985), de Alejandro Doria, protagonizada por Antonio Gasalla; con Luis Brandoni, Betiana Blum y gran elenco e hito local en sus distintas versiones, con autoría del dramaturgo uruguayo Jacobo Langsner. Y es que Crilla fue la Mamá Cora original para la adaptación televisiva previa (data de 1983): interpretó aquel memorable personaje desde el ciclo Alta Comedia, dando el puntapié inicial a lo que vendría. El suceso de esta obra en la pantalla grande tuvo al genial Antonio Gasalla que inmortalizaba, en una completa innovación, a su mítica Mamá Cora: nacieron allí el personaje popular y el filme de culto, un clásico y orgullo para la cinematografía con sello argentino.