Argentina anunció su nuevo compromiso en la lucha contra el cambio climático
El presidente de la Nación, Alberto Fernández, realizó el anuncio en el marco de su participación en la Cumbre de Ambición Climática celebrada durante el quinto aniversario del Acuerdo de París.
Argentina participó de la Cumbre de Ambición Climática en el quinto aniversario del Acuerdo de París, un encuentro organizado por las Naciones Unidas, el Reino Unido —como presidente de la COP26—, Francia, Chile e Italia en el que participan líderes de gobiernos y actores de la sociedad civil tales como empresas, academias, pueblos originarios, jóvenes, ciudades y regiones.
Durante la jornada, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, anunció un nuevo compromiso de la Argentina para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero hacia el año 2030 y para reforzar las capacidades de adaptación de las comunidades a las consecuencias del cambio climático, en particular de las más vulnerables, con el objetivo de promover un desarrollo integral y sostenible.
“El Cambio climático es una realidad que está afectando a la humanidad en su conjunto y que requiere una acción inmediata y coordinada de los líderes de todo el mundo”, expresó el mandatario argentino y remarcó que “la reconstrucción mundial de la pospandemia es la oportunidad que tenemos para avanzar en este sentido, en donde la cooperación internacional y el multilateralismo juegan un rol protagónico”.
De esta manera, el país asume un nuevo compromiso en materia climática que busca no exceder las 358,8 MtCO2eq de gases de efecto invernadero (GEI) al año 2030, elaborar su estrategia de desarrollo a largo plazo con el objetivo de alcanzar un desarrollo neutral en carbono en el año 2050, y trabajar en el Plan Nacional de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático. En 2016, la Argentina presentó su primera NDC, la cual establecía la meta de limitar las emisiones a 483 MtCO2eq con miras al 2030.
Además, Fernández exhortó a avanzar hacia un desarrollo integral y sostenible “en una transición justa que nos permita ponernos de pie y salir mejores de esta crisis”. “La Argentina reafirma su compromiso con el Acuerdo de París y adopta al cambio climático como política de Estado”, aseguró el Jefe de Estado.
Señaló que el país “paga un alto precio por el impacto del cambio climático en su territorio y en su estructura social y productiva”, y destacó el “enorme esfuerzo” realizado en acciones de mitigación y adaptación, cuyo monto asciende a aproximadamente 15.000 millones de dólares con financiamiento internacional. “Aunque ambicioso, esto es insuficiente”, subrayó y reclamó mayor compromiso de los países desarrollados.
Dentro de las nuevas metas propuestas con miras al año 2030, la Argentina limitará sus emisiones de gases de efecto invernadero a un nivel 25.7 %, un número inferior al comprometido en 2016. La nueva contribución, elaborada de forma participativa a través del Gabinete Nacional de Cambio Climático, incluye al fortalecimiento de la educación ambiental, a la transición justa con equidad de género y a la federalización como ejes rectores.
El Presidente también garantizó el compromiso de la Argentina en presentar una estrategia de desarrollo con bajas emisiones a largo plazo con el objetivo de alcanzar un desarrollo neutral en carbono en 2050, y a elaborar un Plan Nacional de Adaptación y Mitigación “claro y ambicioso”. En ese sentido, el Jefe de Estado resaltó la importancia de promover “un diálogo de alto nivel sobre acceso equitativo a medios de implementación, tales como recursos financieros, transferencia de tecnología y construcción de capacidades para la consecución de los compromisos climáticos”.
Este nuevo compromiso se alinea con el objetivo del Acuerdo de París de limitar el cambio climático a 2 grados centígrados, tendiendo a incrementar la ambición en la acción para limitarlo a 1,5 grados. Los ejes de implementación de la nueva contribución serán la promoción de la transición energética, el transporte sostenible, la preservación de ecosistemas —bosques, humedales, océanos, entre otros—, la transformación productiva sostenible en sector de agricultura, ganadería e industria, y la mejora en la gestión integral de residuos. Asimismo, en materia de adaptación, se plantea fortalecer la sensibilización, la construcción de capacidades y la implementación de medidas de reducción de vulnerabilidad en las comunidades, la infraestructura y los sistemas productivos.