Actualmente en Argentina es obligatorio el etiquetado energético de diversos aparatos de uso doméstico o público como ser: heladeras, acondicionadores de aire, freezers, televisores. Sin embargo, no se exige etiqueta de eficiencia energética para las máquinas que dispensan agua potable, enfriada o calentada eléctricamente. Como su uso es cada vez más frecuente en oficinas, locales comerciales y talleres, tanto en edificios públicos como privados, el Instituto de Energía y Desarrollo Sustentable (IEDS) realizó un estudio experimental del consumo de energía, que permitió determinar el gasto no aprovechable, con la posibilidad de obtener un importante ahorro.

Un equipo es más eficiente cuando consume menos energía para una misma prestación. En cambio el término "racional" se refiere a hábitos de consumo responsable, sin disminuir el confort que la misma otorga. Por ese motivo, es importante impulsar cambios culturales hacia un uso eficiente de la energía. El IEDS, dentro de las funciones de Administrador Energético Institucional de la CNEA, promueve dichas acciones, en el marco general de un sistema de gestión de la energía y la eficiencia energética.

Este tipo de aparatos están conectados permanentemente a la red eléctrica y enfría/calientan automáticamente cierto volumen de agua, a fin de que esté a temperatura adecuada para el inmediato consumo. Esta adecuación térmica se realiza constantemente, en base a termostatos, y resulta un gasto de electricidad innecesario cuando el intervalo sin consumo es prolongado. Se puede agregar que es común que este equipo quede encendido las 24 horas del día.

Si bien el consumo de energía también depende de la eficiencia y la capacidad del modelo usado, y hay muchos modelos de dispensadores en el mercado, este informe describe el estudio de distintos equipos dispensadores de agua fría y caliente, y el programa informático que calcula cuánta energía se podría ahorrar, si el equipo se apaga de noche y fines de semana.

Todo el trabajo experimental y de cálculo fue realizado por el Ingeniero Fabrizio Battaglini y el Técnico Valentín Vaucheret. La ingeniera Erica Gutiérrez tuvo a su cargo la revisión del informe.

Los resultados del análisis arrojan un importante ahorro energético-económico y un gran beneficio ambiental, por el adecuado uso de estos equipos, al considerar todos los dispensadores en uso en el país.