Ocurrió en el control “Gendarme Fermín Rolón” sobre la Ruta Nacional Nº 11 en la localidad formoseña de Clorinda cuando los funcionarios detuvieron la marcha de un camión con semirremolque perteneciente a una empresa dedicada al servicio de paquetería y descubrieron una caja que contenía 500 ampollas del fármaco.

Con intervención del Juzgado Federal Nº 2 de Formosa se dispuso que se realice una entrega vigilada. Por lo que, a la semana siguiente, en Mendoza, fueron detenidos un ciudadano chileno y otro argentino, quienes se presentaron en la oficina del servicio logístico como destinatarios de la encomienda.

Además, se realizó un allanamiento en la habitación del hotel donde se alojaba el extranjero y se decomisaron 80 ampollas más del opioide sintético, aparentemente obtenidas de igual manera.

En consecuencia, el Juzgado Federal ordenó el decomiso total de la sustancia y la detención de los implicados, al tiempo que subrayó la necesidad de profundizar la investigación con un enfoque de alcance internacional. Esto responde al alto poder letal del estupefaciente —50 veces más potente que la heroína y 100 veces más que la morfina— y al reconocimiento de que se trata de un opioide sintético que representa una amenaza global por su elevado potencial adictivo y su impacto en la salud pública.