Las instalaciones del Ferrocarril Central Argentino en Retiro fueron inauguradas en 1915; encabezado por la terminal monumental, el conjunto arquitectónico abarca cabinas de señales, puentes peatonales, galpones y surtidores de locomotoras, entre otros edificios anexos que comparten un código formal y constructivo bajo las líneas de la tradición funcional inglesa.
Entre ellos se encuentran, en el mismo predio, la torre de agua y el depósito ladrillero que hoy aloja al Museo Nacional Ferroviario, establecido con motivo de la exposición de 1968 en la Estación Retiro. Su colección relata la historia del ferrocarril argentino desde 1857 e incluye una sala que rinde homenaje a Raúl Scalabrini Ortiz, defensor de la soberanía económica argentina y destacado ideólogo de la nacionalización de los ferrocarriles bajo el gobierno del general Perón en 1948.
El depósito de agua, con muros exteriores de ladrillo y una estructura interior metálica, soporta cinco niveles de bovedilla y un tanque superior de hormigón armado con capacidad para 200.000 litros. El edificio fue refuncionalizado en 2000 para albergar el primer museo argentino destinado a difundir, preservar y exponer los valores de la Arquitectura, el Diseño y el Urbanismo. Las obras estuvieron a cargo de un equipo de arquitectos que incluía al creador de la institución, Julio Keselman.
Textos: Juan Pablo Pekarek.
Ubicación:
Provincia: Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Dirección: Av del Libertador Gral San Martín 405 (y Ramos Mejía).
Declaratoria: Decreto N° 262/1997
Categoría: Bien de interés histórico-artístico nacional