El titular de la cartera educativa nacional expresó durante su intervención: “El desafío que tenemos por delante es jerarquizar nuestra agenda educativa para que la escuela sea, no la única pero sí la principal herramienta de ruptura de las profundas desigualdades”. Y enfatizó:“Consideramos central estos espacios de diálogo, de aprendizaje mutuo y de reafirmación del compromiso que deben tener cada uno de nuestros países y de nuestros gobiernos en priorizar la agenda educativa y en concertar caminos comunes que mencionen y otorguen visibilidad a la centralidad de nuestras politicas públicas, las inequidades y la creciente pobreza que transita América Latina”.

El debate examinó lo que podemos aprender del impacto del COVID-19 en la educación de América Latina y el mundo. Del mismo modo, se enfatizó la necesidad urgente de reabrir las instituciones educativas en condiciones de confianza y seguridad sanitaria. Se exploraron las experiencias de las organizaciones de docentes y estudiantes en respuesta al COVID-19, la contribución vital de los trabajadores y las trabajadoras de la salud, y la urgente necesidad de aprovechar el potencial de la tecnología de la educación para promover condiciones de igualdad y justicia social y garantizar el derecho a una escuela de calidad a todas las niñas, niños y jóvenes de nuestros países.

La actividad también contó con la presencia de Camilla Croso, directora del Programa de Educación de la Open Society y de Amilcar Sanatan, representante del Global Student Forum.