El ministro Carlos Tomada inauguró junto a su Gabinete las exposiciones de la Cámara de la Industria del Calzado, de las Manufacturas del Cuero y Afines, y del sector de la Indumentaria Infantil, realizadas en el predio de Costa Salguero. Cabe destacar que se trata de importantes sectores en la generación de puestos de trabajo en el país.

Durante su recorrido resaltó que el país “recuperó los puestos de trabajo que se habían perdido” el año pasado al desatarse la crisis económico-financiera mundial. “A un año de la crisis, la Argentina recuperó los puestos de trabajo que se habían perdido“, puntualizó en la exposición, oportunidad en la que firmó un convenio de educación laboral con la Cámara Industrial de las Manufacturas del Cuero y Afines de República Argentina.

Tomada dijo que se “está saliendo de una crisis general que no se generó en Argentina, pero que impactó en su economía. Esto no es sólo viento de cola, es voluntad política basada en la creación del trabajo“, puntualizó el ministro, quien estaba acompañado por la secretaria de Trabajo, Noemí Rial, y del subsecretario de Empleo, Matías Barroetaveña, entre otros funcionarios.

Las cámaras marroquinera, del calzado y de ropa de bebés -que adhieren a la Confederación General Económica de la República Argentina (CGERA)-, dan trabajo a 155 mil personas.

El titular de los marroquineros, Raúl Zilbersztein, acotó que “no somos tan chicos, pero nos quieren hacer creer que lo somos”.

Zilbeztein estuvo acompañado por otros empresarios del sector, entre ellos el miembro de la comisión directiva, Luciano Ciambela, expositor de la muestra. Delante de un auditorio lleno de empresarios y de dirigentes sindicales del sector, Tomada recalcó “es la primera vez que enfrentamos una crisis con un modelo diferente, modelo productivo, que protege los puestos de trabajo y a la producción”.

El convenio suscripto por el Ministerio y los empresarios consiste en la incorporación de trabajadores por un período de cuatro meses a cargo del Estado en su mayor parte y el resto por parte del sector empresario. Durante los cuatro meses en que el trabajador presta servicios en la empresa cobrará 750 pesos, al cabo del cual si le interesa a la empresa y al trabajador, éste quedará incorporado a la planta permanente.

El trabajador recibe instrucción del oficio que caracteriza a la empresa y cuando finaliza el período educativo se le entrega un certificado de la nueva habilidad. El trabajo consiste en una jornada de cuatro horas.

“Este es el modelo que tenemos que defender, no es un momento cualquiera de la nuestra historia -agregó Tomada-. O continuamos en este rumbo o volvemos al de la especulación financiera y al desmantelamiento de la industria”.