Se aproximan las fiestas navideñas y en el árbol de los regalos la destacada surfista argentina Lucía Indurain, oriunda de Miramar, deposita su máximo deseo deportivo: conseguir la plaza olímpica en la misma ola de El Salvador, donde acaba de ganar la medalla plateada en un torneo del nuevo circuito continental, tras volver a la competencia después de 10 meses como consecuencia de la pandemia mundial.

“Estoy muy feliz por este resultado que me ubica en el segundo del continente en un año raro y loco. Fue un evento cinco estrellas con un alto nivel de competencia, en la misma ola donde el año que viene ojalá pueda representar a la Argentina en el Preolímpico, donde estarán en juego las plazas olímpicas, le comentó Indurain a la sección Deportes de www.argentina.gob.ar.

“Este es un gran cierre de año después de tanto tiempo sin competir. El trabajo de mucho tiempo dio sus frutos pero no hay que conformarse, hay que seguir. Acabo de vivir un torneo increíble y lo estoy disfrutando. Después de volver a casa debo seguir entrenando fuerte en busca de ese gran sueño que es ayudar para que la bandera argentina del surf esté presente en los Juegos Olímpicos de Tokio”, prosiguió la surfista.

A sus 23 años Lucía muestra toda su ilusión y lo fundamenta con entrenamiento y resultados. A los 12 comenzó a practicar este deporte en la playa de El Náutico, en su querido Miramar; surfear entre varones potenció sus destrezas y hoy ya deja de ser una promesa del surf argentino para transformarse en una realidad. Ella sueña con Tokio y tiene motivos.