Segunda jornada del Ciclo “Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas e Identificación de Personas con Identidad Desconocida”
Se llevó a cabo la segunda jornada del Ciclo “Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas e Identificación de Personas con Identidad Desconocida”, organizada por el Ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Sabina Frederic, junto con diferentes organismos especializados en la materia.
El encuentro de hoy, denominado “La Identificación de Personas NN y su vinculación con la desaparición de Personas”, contó con la participación del coordinador del Área de Identificación de Personas Halladas con Identidad Desconocida del Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (SIFEBU), Nicolás María Espert, y el presidente del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), Luis Fondebrider.
Al inicio, Espert repasó lo conversado durante la primera jornada, cuando Leticia Risco, Coordinadora del SIFEBU, y Marco Colombo, titular de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX), del Ministerio Público Fiscal, remarcaron el trabajo coordinado y conjunto que realizan ambas agencias respecto de la búsqueda de personas extraviadas. Tras ello, recalcó la relevancia de la Resolución Ministerial 504/2013, que “definía un plan de trabajo destinado a cooperar en la identificación de personas detenidas desaparecidas durante el terrorismo de Estado, cuyos cadáveres hubieran podido ser inhumados con identidad desconocida”. Esta tarea, explicó Nicolás María, permitió identificar a Luciano Arruga, tras 5 años y 9 meses, a través de sus huellas dactilares, lo que se complementó, luego, por vía genética. Dicho trabajo sólo fue posible gracias a la cooperación, entre otros, del Equipo Argentino de Antropología Forense.
“Esa identificación hizo replantear internamente al Ministerio de Seguridad en el trabajo que se venía haciendo. Se optó por combinar el trabajo de búsqueda con el trabajo de identificación, que derivó en la conformación del Sistema Nacional de Búsqueda, cuya estructura da cuenta de esa relación entre la identificación de personas NN y la búsqueda de personas desaparecidas cuya identidad conocemos. Este trabajó nos ha permitido registrar 9.371 personas NN, 2.549 identificadas y 155 personas desaparecidas identificadas como NN”.
Luego, Espert explicó conceptos básicos y los objetivos a tener en cuenta a la hora de construir un subsistema de identificación de personas NN. Además, profundizó sobre el trabajo que realiza el SIFEBU y la preparación necesaria para futuros desafíos: “para buscar e identificar personas tenemos que tener una política pública integral y comenzar a pensar este fenómeno como algo específico que demanda un abordaje diferencial. Es lo que nos marca también la pauta de lo que debemos hacer hacia delante”, concluyó.
“Agradezco al SIFEBU y al Ministerio de Seguridad por esta invitación. Hace ya, por lo menos, unos 10 ó 12 años que estamos colaborando atrás de las diferentes gestiones y políticas que ha tenido esta Cartera. La idea siempre es mejorar el Sistema de gestión de personas desaparecidas y cuerpos no identificados”, comenzó Luis Fondebrider, quien continuó: “el EAAF, hace 36 años trabaja en la búsqueda de personas desaparecidas y su identificación. Trabajar en los distintos países del mundo nos ha dado la posibilidad de ver otras experiencias y prácticas. Es importante ver qué pasa en otros países”.
El presidente del Equipo Argentino de Antropología Forense centró su exposición en las diferentes consideraciones en torno a la gestión de información en procesos de identificación humana, y propuso pensar “con otra cabeza, no la típica donde estamos divididos y donde cada uno hace las cosas como puede”.
A su vez, definió conceptos básicos sobre la materia (“personas vivas” y “muertas”, “denuncias de familiares”, “proceso de búsqueda”, “trazabilidad”, entre otras). Fondebrider describió la situación local a nivel forense y de criminalística, e hizo especial hincapié en la problemática que representa la dispersión de datos a lo largo del país pues, según explicó, “impiden el método de comparación sistemática de rasgos de personas desaparecidas con iguales rasgos de personas aparecidas sin identificar, lo que deja estériles la mayoría de las búsquedas”.
Para finalizar, Fondebrider detalló el trabajo que realiza el Equipo Argentino de Antropología Forense en la búsqueda de personas, su identificación y la recolección y sistematización de la información para facilitar futuros trabajos.