Se publicó un estudio del impacto de la fertilización mineral sobre la actividad microbiana y hongos del suelo en pastizales
El trabajo “La fertilización mineral afecta la actividad microbiana y los hongos endófitos, pero no la biomasa microbiana favoreciendo la producción de los pastizales semiáridos” fue desarrollado por el INTA EEA Santa Cruz, Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA) y el Centro de Investigación y Transferencia del CONICET. Investigó el efecto de la fertilización mineral en pastizales semiáridos de la Patagonia, específicamente sobre la actividad microbiana del suelo, la colonización de hongos endófitos y la producción de las plantas.
La investigación se desarrolló en el campo experimental del INTA “Potrok Aike”, utilizando un diseño de bloques completamente aleatorizados con diferentes tratamientos de nutrientes minerales: nitrógeno (N), fosforo (P), potasio (K), la combinación de NPK y un control. Las tasas de aplicación de nutrientes para los tratamientos fueron de 10 g de nutrientes por m2. La urea fue la fuente de fertilizante inorgánico N, el superfosfato triple fue la fuente de P, y el sulfato de potasio fue la fuente de fertilizante K. Se evaluaron variables como la biomasa microbiana (C y N), la respiración basal del suelo, la colonización de hongos endófitos (micorrizas arbusculares y septados oscuros) y la productividad de las plantas.
Uno de los responsables de la Investigación, el Dr. Santiago Toledo del grupo de Investigación Forestal, Agrícola y Manejo del Agua del INTA Santa Cruz recalcó que “las prácticas de fertilización mineral en pastizales son adoptadas para aumentar la producción de forraje, pero su impacto en el ecosistema suelo-planta-microbioma no está completamente comprendido, especialmente en ecosistemas semiáridos como los de la Patagonia Austral”.
Para conocer el impacto en los pastizales estudiados los investigadores aplicaron diferentes nutrientes minerales (N, P, K y NPK) en parcelas experimentales, siguiendo un diseño estandarizado (protocolos internacionales dentro de una red denominada NutNet) y realizaron mediciones de variables microbianas y de plantas durante varios años posteriores a la fertilización, esto permitió evaluar el impacto sobre el ecosistema en un estudio de largo plazo que permitieron validar los resultados obtenidos.
Toledo destacó la importancia y los resultados del trabajo, que permitió determinar que “la fertilización mineral mostró efectos significativos en la actividad microbiana del suelo y la colonización de hongos endófitos”. “Se observó una disminución en la respiración basal del suelo y en la colonización de hongos micorrízicos arbusculares y septados oscuros, pero no se encontraron cambios en el carbono y nitrógeno de la biomasa microbiana. Observamos que la magnitud de esta respuesta dependió de los años posteriores a la fertilización, siendo más marcado a los 4 años de evaluación. Además, se evidenció un aumento en la biomasa vegetal en los tratamientos con N y NPK, destacando la importancia de la fertilización nitrogenada para favorecer la producción de forraje, logrando incrementar del 25 al 40 % a lo largo de 2 y 4 años, respectivamente”, subrayó.
Toledo destacó que “este estudio contribuye a la comprensión de los efectos de la fertilización mineral en los ecosistemas semiáridos, resaltando la importancia de considerar a los atributos microbianos del suelo (hongos endófitos, su biomasa y actividad) en las estrategias de manejo de los pastizales para la producción sostenible de forraje”, dado que son herramientas bio-indicadoras de manejo del pastizal.
El trabajo fue publicado en enero de este año 2024, en la revista Pedobiologia - Journal of Soil Ecology de Alemania. Los autores son Santiago Toledo, Verónica Gargaglione y Pablo L. Peri. Más información en Repositorio INTA Digital