Presidencia de la Nación

Salud avanza en la Estrategia de Regionalización Perinatal

El Ministerio de Salud de la Nación junto a OPS/OMS organizó un encuentro con jefes de los programas materno infantiles provinciales y autoridades hospitalarias de todo el país para fortalecer la estrategia de regionalización en cada jurisdicción.

Jefes de los programas materno infantiles de las provincias, autoridades hospitalarias, directores del primer nivel de atención de todo el país y equipos técnicos de la cartera sanitaria nacional, se reunieron la semana última en Buenos Aires con el objetivo de avanzar en la estrategia de Regionalización Perinatal, una iniciativa impulsada conjuntamente por el Ministerio de Salud de la Nación y la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS),

En las II Jornadas Nacionales de Regionalización de la Atención Perinatal se discutieron diversas iniciativas para fortalecer esta estrategia en cada jurisdicción y conformar los equipos de capacitación que acompañarán el proceso. La Regionalización de la Atención Perinatal es una política que coordina los servicios de salud dentro de un área geográfica sobre la base de acuerdos entre las instituciones y los equipos de salud.

“Venimos trabajando diversas estrategias en forma conjunta, transversal y creemos que es la mejor manera de encarar esta reunión. Estamos para escucharlos, debatir y finalmente consensuar políticas de salud”, dio la bienvenida el subsecretario de Programas de Promoción, Prevención y Atención Primaria, Mario Kaler, durante la inauguración de las jornadas. Y recalcó que “la implementación de esta estrategia de regionalización implica salvar vidas y no me cabe duda que todos los que estamos acá trabajamos por el mismo objetivo.”

La directora nacional de Maternidad, Infancia y Adolescencia, Diana Fariña, destacó por su parte que se debe “analizar con respeto, sinceridad y compromiso uno de los aspectos más importantes de la salud perinatal, como es la regionalización. Y la única forma de mejorar es que compartamos con sinceridad, con autocrítica lo que nos pasa en nuestro quehacer cotidiano”. Además, sostuvo que “el tema de que cada niño nazca y cada madre se atienda en el nivel de complejidad que se merece, es algo en lo que todos estamos de acuerdo”.

De la apertura del encuentro también participó María Victoria Bertolino, consultora en Salud de la Familia, Género y Curso de Vida de la Organización Panamericana de la Salud.

La Regionalización de la Atención Perinatal busca optimizar los recursos disponibles, utilizar las tecnologías y los procedimientos costo efectivos y mejorar la calidad de la atención, basándose en el diagnóstico de los indicadores de salud de la población, los patrones de utilización de los servicios de salud, y la disponibilidad y capacidades de los recursos humanos, de la infraestructura y de las tecnologías en los servicios existentes.

Esta política reorganiza y coordina las instituciones de los distintos niveles a través de un proceso de categorización, establecimiento de procedimientos de referencia y contra-referencia y redistribución de los recursos humanos.

Los programas de regionalización de la atención materno-perinatal se diseñaron con el fin de organizar los servicios para que las mujeres y los recién nacidos de alto riesgo tengan su atención en hospitales provistos con la experiencia y la tecnología requerida para asegurarles cuidados óptimos. Así, las maternidades fueron clasificadas en tres niveles de atención (II; IIIA; IIIB), se organizaron los sistemas de transporte y se construyeron vínculos entre las estructuras de salud con el fin de mantener la capacitación adecuada en los niveles de menor complejidad para una oportuna referencia de los casos de alto riesgo.

Nacer en un lugar adecuado
Casi todas las jurisdicciones cuentan con un elevado número de lugares en los que se realizan partos. Esta abundancia de efectores hace que todavía un grupo de niños en situación de riesgo por distintas razones, nazcan en instituciones que carecen de la complejidad necesaria para su caso o instituciones que aun no cumplan con las Condiciones Obstétricas y Neonatales Esenciales (CONE) formuladas por la OMS: cirugía y procedimientos obstétricos; anestesia; transfusión de sangre segura; tratamientos médicos; asistencia neonatal inmediata; evaluación del riesgo materno y neonatal; y transporte oportuno al nivel de referencia.

Por eso resulta necesario fomentar el armado de Redes de Atención Perinatal, realizar una planificación cuidadosa, y detectar y derivar oportunamente a las madres con elevada probabilidad de tener un parto o un recién nacido de riesgo, a fin de aprovechar al máximo los recursos y asegurar su sustentabilidad en el tiempo.

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