El Directorio de la ARN lamenta profundamente la pérdida del Ing. Hugo Mugliaroli, acaecida el pasado viernes 5 de junio.

El Ing. Mugliaroli fue un precursor de las actividades de promoción y desarrollo en distintos usos de subproductos de la energía nuclear (medicina, agroindustria e investigación, entre otros), como así también de la regulación y control de estos.

Mugliaroli egresó de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires como Ingeniero Industrial. Fue un profesional destacado de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), donde desarrolló toda su carrera laboral (1957-1995), reconocida en el ámbito nacional, regional e internacional.

Ingresó a la CNEA en 1957 en el Departamento de Radioisótopos, a cargo del Ing. Celso Papadópulos, donde trabajó en protección radiológica y en la regulación y control de Usuarios Externos, con el Decreto N° 842/58 como referencia. Posteriormente lo hizo en Radiofísica Sanitaria, responsable del control de instalaciones de la CNEA.

Su trayectoria laboral fue extensa. Nos limitaremos a brindar una síntesis de los aspectos más salientes y de los vinculados a la regulación y control.

Integró y luego presidió el Consejo Asesor en Aplicaciones de Radioisótopos (CAAR) durante 30 años, recomendando el otorgamiento de miles de permisos individuales e institucionales para usos de radioisótopos y radiaciones ionizantes para distintos propósitos. El CAAR, organismo asesor del presidente de la CNEA, tenía representantes de Salud Pública, de la Universidad de Buenos Aires y de la CNEA.

Tuvo activa participación en la elaboración de normas para el uso de radioisótopos y radiaciones ionizantes en medicina (permisos individuales), asesores físicos en radioterapia, operación de instalaciones industriales de irradiación, operadores de equipos de gammagrafía, operación de unidades de medicina nuclear y de terapia radiante (permisos institucionales), entre otras.

Participó en el desarrollo de los contenidos de los cursos de metodología y aplicación de radioisótopos y en dosimetría en radioterapia. Fue primer director de este último y docente en ambos cursos.

Fue el primer Especialista en Física de la Radioterapia del país (físico médico), destacado por la CNEA en el Hospital Rivadavia. Fue distinguido por la Sociedad Argentina de Física Médica (SAFIM).

Integró la Comisión Asesora de la Secretaría de Salud Pública de la Nación (SESP) que desarrolló y elaboró el marco legal regulatorio enmarcado en la Ley 17557 sobre protección radiológica contra rayos X, como también el Decreto 6320/68, reglamentario de dicha ley. Con el asesoramiento de dicha Comisión se creó, en el ámbito de la Dirección Nacional de Saneamiento de la SESP, el Servicio de Radiofísica Sanitaria.

Fue impulsor de la Resolución Conjunta N° 3377/80 de la SESP y la CNEA, que hizo propias las normas sobre operación de unidades de terapia radiante y de medicina nuclear, aprobadas por el CAAR. Impulsó también la concreción de la Comisión Asesora Conjunta de la CNEA y la SESP, para la interpretación y aplicación de la Norma Conjunta citada.

Impulsó y negoció con Canadá las modificaciones necesarias para que la Central Nuclear Embalse pudiera producir cobalto 60 (para el mercado de radioisótopos de uso medicinal e industrial), que no estaba contemplado en el diseño original de la central. El resultado es importantísimo hoy en día: Argentina es el tercer productor mundial de cobalto 60.

Impulsó y participó en el desarrollo de equipos de cobaltoterapia y en el diseño y construcción de celdas y fuentes selladas de cobalto 60 para uso medicinal e industrial, en el Centro Atómico Ezeiza (CAE), actualmente operadas por Dioxitek.

Participó en el diseño, desarrollo y construcción de la Planta de Irradiación Semi-industrial del CAE y de la Planta de IONICS, ubicada en la localidad de Pacheco, provincia de Buenos Aires.

Participó en reuniones científicas, congresos nacionales e internacionales. Publicó importantes trabajos. Fue experto internacional del Organismo Internacional de Energía Atómica.

Recibió premios y reconocimientos internacionales, siendo uno de los más valorados por él mismo; el Premio Celso Papadópulos, que le fue otorgado, junto al Ing. Alejandro Placer (post-mortem), por la Sociedad Argentina de Radioprotección, durante el Congreso Internacional de Protección Radiológica (IRPA-12), realizado en Buenos Aires en 2008. Premio instaurado para distinguir a personas que se hayan destacado en el área regulatoria de la seguridad radiológica y nuclear.

Fue Jefe de Departamento Fuentes Intensas y luego Director de Radioisótopos y Radiaciones de la CNEA.

Fue partícipe importante como impulsor y hacedor del desarrollo de la actividad nuclear de nuestro país, llevada a cabo por la CNEA. Solía decir “La CNEA, además de ser nuestro segundo hogar, es nuestra escuela del conocimiento, y también, y especialmente, escuela de vida".

Desde el Directorio de la ARN acompañamos a su familia y amigos en estos difíciles momentos que les toca atravesar.