El Megaoperativo “Sapucay” permitió desarticular una red narco que contaba con vínculos políticos en la provincia de Corrientes y ramificaciones en algunas fuerzas policiales. El Ministerio de Seguridad no terminó su tarea con las detenciones del intendente de Itatí, Natividad Terán, su vice, Fabio Aquino, y el comisario local. Desde entonces, además de incautar grandes cantidades de droga, intensificó las tareas de inteligencia criminal para dar cuenta de todos los integrantes de la red y sus roles en el entramado narco. Así, la Gendarmería Nacional arrestó en las últimas horas al ex jefe municipal de la localidad de Empedrado, Juan Faraone, en su domicilio de la capital correntina.

Asimismo, fueron apresados dos familiares directos del ex intendente, gendarmes que habían sido captados por la “narcopolítica” en 2014. Desde entonces, se los mantuvo en la fuerza como “carnada”, siendo vigilados de forma permanente y utilizados para estudiar el comportamiento del resto de los integrantes de la banda. De esa forma se obtuvo información precisa que permitió conocer cómo operaban los diferentes miembros y los roles que ocupaba cada uno de ellos.

Estos procedimientos se realizaron poco después de la detención de “Morenita” Marín, quien se había transformado en uno de los prófugos más buscados del país y cayó la semana pesada. Las fuerzas federales multiplicaron su despliegue en la zona, en permanente colaboración con las autoridades provinciales y judiciales, con el objeto de continuar investigando posibles conexiones de la organización, en tanto que también se estudiaron nexos en otros distritos.