Presidencia de la Nación

La revista Caras y Caretas en la Biblioteca Nacional de Maestros


Un nuevo encuentro del Ciclo @Index: explorando autores y lecturas, organizado por la Biblioteca Nacional de Maestros (BNM) contó con la Dra. Andrea Matallana, quien situó el enorme valor de la revista Caras y Caretas como fuente historiográfica. Entre el humor y el ensayo, la emblemática revista Caras y Caretas es una excelente fuente histórica para conocer una época de convulsión política e inicios de la cultura de masas.

La socióloga y doctora en historia hizo un recorrido desde los orígenes de la revista, examinando cómo la gráfica, el humor, la fotografía, la política, el ensayo literario y la publicidad que se entretejían en la misma publicación dieron como resultado un producto innovador y polémico para la época.

Caras y Caretas fue un conocido semanario que se publicó principalmente entre 1898 y 1939. Uno de los datos más llamativos es la cantidad de ejemplares vendidos que tuvo, algunas ediciones alcanzaron a más de 100 mil. Otro aspecto que hace única a esta revista es que albergó a excelentes dibujantes políticos imbuidos de un pensamiento republicano e ideas libertarias que transmitieron a través de sus ilustraciones. Asimismo, fue un espacio de expresión de destacados escritores y fotógrafos.

Una de las razones por las que reconocemos fácilmente a la revista es por su portada y sus dibujos, así como por las primeras experiencias lúdicas y políticas de montaje fotográfico con un sentido humorístico.

La publicación interpeló, durante sus cuatro décadas de existencia, a la sociedad en su conjunto y fue leída por un público de todas las clases sociales, a diferencia de otras revistas de la época. De acuerdo con Matallana, “este público heterogéneo se vislumbra en la revista a través de dos dimensiones: la primera, es la del material gráfico y la segunda, del material literario.” La investigadora señaló que la revista “fue pionera en el uso de la fotografía y del fotograbado; publicó imágenes de gran calidad, incorporando de manera masiva la fotografía, y esto le valió también de una crítica muy fuerte de los diarios tradicionales donde primaba el texto escrito”.

En el cierre de la charla, Matallana sostuvo que Caras y Caretas “debe ser reivindicada como una fuente clave que expresa y permite reconstruir y analizar el clima cultural, político y económico de un período bastante extenso de la historia argentina”.

Para conocer más sobre las publicaciones antiguas

La BNM cuenta con ejemplares originales desde 1899 a 1939. Es una de las colecciones especiales y puede ser consultada cumpliendo una serie de requerimientos estrictos orientados al cuidado y la preservación del material.
Un dato curioso y sumamente útil para quienes quieran acercarse a las publicaciones en formato digital es que la Hemeroteca Digital de la Biblioteca Nacional de España cuenta con más de 2000 ejemplares de la revista Caras y Caretas a los que se puede acceder fácilmente ingresando aquí

Otro importante corpus de publicaciones periódicas argentinas del siglo XIX y XX se encuentra es el Instituto Iberoamericano de Berlín

Scroll hacia arriba