“La enfermedad COVID-19 no sólo afecta al cuerpo, sino que generó un nuevo modo de organización de la vida cotidiana. El eje rector de la salud comunitaria es ayudar y acompañar en esta reorganización a los barrios populares”, describió la directora de Salud Comunitaria de la provincia de Buenos Aires, Noelia López.

Una de las estrategias de abordaje territorial desarrolladas en coordinación con Nación es el Dispositivo Estratégico de Testeo para Coronavirus en Territorio de Argentina (DETeCTAr) para la búsqueda activa casa por casa de personas con algún síntoma compatible con COVID-19 (fiebre, tos, dolor de garganta, dificultad para respirar y pérdida súbita del sentido del olfato y del gusto) y, en ese caso, proceder al testeo. Para ello, “se realiza un mapeo previo identificando cuáles son las zonas más complejas de cada barrio”, explicó López.

Luego, un equipo interdisciplinario de médicos, enfermeros, trabajadores sociales, psicólogos, promotores de salud y referente comunitarios recorren los barrios para detectar en forma precoz casos sospechosos, realizar el estudio para el diagnóstico, y de confirmarse la enfermedad prestar cuidados y proceder al aislamiento. Además, en estos operativos están presentes agentes de otros ministerios para asistir en situaciones que exceden al área de la salud.

“Es importante la presencia del Estado en los territorios. La premisa es proteger y estar alerta a los grupos con mayor vulnerabilidad en donde creemos que las políticas del Estado deben estar más presentes”, concluyó.