La CNEA celebró su 75° aniversario en el reactor multipropósito RA-10
Participaron el Dr. Ing. Germán Guido Lavalle, titular del organismo; el presidente del Consejo Nuclear Argentino, el Dr. Demian Reidel, y representantes de las empresas del sector nuclear, entre otras autoridades.
La Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), organismo dependiente de la Jefatura de Gabinete de Ministros, conmemoró sus 75 años de trayectoria y el Día Nacional de la Energía Atómica con un acto institucional en las instalaciones del reactor multipropósito RA-10, ubicado en el Centro Atómico Ezeiza.
El evento estuvo encabezado por el Dr. Ing. Germán Guido Lavalle, presidente de la CNEA, y el Dr. Demian Reidel, presidente del Consejo Nuclear Argentino y titular de Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NA-SA).
La celebración contó, además, con la presencia de autoridades nacionales, representantes del ecosistema nuclear argentino y referentes de organismos y empresas del sector. Entre ellos, participaron la representante de la Dirección de Seguridad Internacional, Asuntos Nucleares y Espaciales de la Nación, Mtra. María Jimena Schiaffino, y el presidente de la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN), el Dr. Leonardo Sobehart.
También estuvieron presentes en el estrado el Dr. Federico Matías Ramos Nápoli, gerente general de Dioxitek S.A.; el Dr. Marcelo Famá, gerente general de NA-SA; el Ing. Darío Giussi, gerente general de INVAP S.A.U., y el Ing. Rodolfo Kramer, gerente general de CONUAR S.A.
El Dr. Ing. Guido Lavalle agradeció a todos los trabajadores de la CNEA y del sector nuclear por su empeño y esfuerzo, así como al Gobierno nacional y al presidente Javier Milei por su apoyo. También subrayó: “Nos reunimos para este acto en un lugar emblemático de uno de nuestros proyectos, la boca del tanque del RA-10. Esta foto es un símbolo importante, porque transmite un éxito, que somos un equipo que ha logrado en estos 75 años hacer desarrollos que sirven para mejorar la calidad de vida de los argentinos y que nos permiten exportar”.
“Tenemos una Comisión Nacional de Energía Atómica que, a partir del desarrollo tecnológico y la formación de recursos humanos, fue la plataforma para que surgieran las empresas del sector nuclear que hoy compiten en el mundo, exportan, generan trabajo y ofrecen servicios en la Argentina. Esto es un verdadero éxito de una política de Estado”, sostuvo. Al mismo tiempo planteó que el desafío es volver a crear las condiciones para generar más empresas de base tecnológica. “Debemos renovarnos para que la CNEA sea una nueva plataforma de desarrollo y de lanzamiento para el país”, expresó, planteando además la necesidad de seguir formando recursos humanos para acompañar un recambio generacional.
El Dr. Ing. Guido Lavalle anticipó cuáles son los cinco hitos que la CNEA busca cumplir en el próximo año: que el RA-10 alcance criticidad; comenzar el reacondicionamiento de la Planta Industrial de Agua Pesada (PIAP); recomenzar la minería del uranio; poner en marcha el Centro Argentino de Protonterapia, y volver a enriquecer uranio para completar el ciclo del combustible nuclear.
A continuación, tomó la palabra el Dr. Reidel, quien destacó el rol estratégico del Plan Nuclear Argentino en el contexto de la demanda de energía global y expresó: “El futuro es nuclear y Argentina está llamada a liderarlo. Con el desarrollo del ACR-300, vamos a ofrecer al mundo una fuente de energía limpia, estable y escalable. El ACR-300, una maravilla tecnológica de 300 MW diseñada por ingenieros argentinos, es una pieza central del Plan Nuclear, que posicionará a nuestro país a la vanguardia de la nueva revolución energética”.
Además, detalló: “Vamos a comenzar con la construcción de cuatro módulos en el sitio Atucha, que permitirán casi duplicar la capacidad nuclear instalada del país. Esta es sólo la primera etapa. Luego, vamos a licenciar esta tecnología en el resto del mundo. Esto no sólo va a transformar nuestra matriz energética, también va a cambiar la matriz exportadora de la Argentina.” Reidel concluyó: “Contamos con una ventaja competitiva enorme: capital humano extraordinario y tecnología propia”.
La ceremonia fue transmitida en simultáneo en todos los centros atómicos y regionales de la CNEA, lo que permitió compartir este importante aniversario con todo el personal a lo largo del país.
Tras el acto principal, se llevó a cabo la tradicional entrega de reconocimientos institucionales al personal de la CNEA en cada una de sus sedes. En esta ocasión, fueron homenajeados quienes cumplieron 30 años de servicio en la Administración Pública Nacional, 45 años de labor en la institución, y quienes se jubilaron durante el año 2024.
En el Centro Atómico Bariloche, el acto fue encabezado por el vicepresidente de la CNEA, Ing. Luis Rovere, quien enfatizó: "Quiero agradecer a todos los trabajadores de la CNEA por su esfuerzo y dedicación a lo largo de todos estos años. Hemos alcanzado numerosos logros, pero también tenemos por delante muchos proyectos que exigirán aún más trabajo”.
“Estos proyectos buscan generar un circuito virtuoso en la creación de nuevas tecnologías y empresas de base tecnológica, que permitan a la Argentina recuperar la inversión realizada en organismos como la CNEA -afirmó Rovere-. A lo largo del tiempo ha existido un consenso en mantener el compromiso del país con una institución de esta magnitud, la más grande en investigación y desarrollo. Estoy convencido de que tenemos un potencial enorme por delante".
Un legado de ciencia y desarrollo tecnológico
Fundada en 1950 mediante un decreto del Poder Ejecutivo Nacional, la CNEA tiene como misión consolidar a la Argentina como una nación líder en el uso pacífico y seguro de la energía nuclear, apostando desde sus inicios al desarrollo científico y tecnológico. En conmemoración de su creación, cada 31 de marzo se celebra también el Día Nacional de la Energía Atómica.
Durante siete décadas y media, la CNEA ha sido reconocida como una institución de referencia internacional en tecnología nuclear. El RA-10, sede del acto conmemorativo, representa un hito más en esta historia. Este reactor de última generación garantizará el autoabastecimiento de radioisótopos en el país y abrirá nuevas oportunidades de exportación para la Argentina.
Además, permitirá la producción de otros insumos estratégicos, como el silicio dopado, utilizado en dispositivos electrónicos, y dará lugar al Laboratorio Argentino de Haces de Neutrones (LAHN), una instalación que posicionará al país en la vanguardia de la investigación en ciencias básicas, salud e industria.
Con 75 años de historia, la CNEA continúa cumpliendo su misión de generar conocimiento científico-tecnológico, formar recursos humanos altamente calificados e impulsar la creación de empresas competitivas a nivel mundial.